Notes

TRACK 12; THE TIDE.

Ésto es totalmente un recuerdo de cuando comenzamos, más para los tropiezos, mis miedos, tus dudas.
Cuando nosotros estuvimos juntos la primera vez sabía que aunque fuese menor, aunque fuese más pequeño, aunque fuese todo lo contrario tenía que poner todo de mí para que ésto funcionara, para que durara.
Teníamos que formar un trabajo en equipo que fuera tan fuerte como para entrar a aguas frías y mantenernos aún así con los pies en la tierra; iba a ser algo complicado más no imposible.
Estuvimos con el agua en el cuello, con las manos congeladas, los labios quebrados junto a la voz, los ojos inyectados en rojo, y mientras más me seguía aferrando a ti lo único que podía pensar era en que no quería que dejaras que la marea me llevara, que no nos llevara a ambos, que no encontraras a nadie más, que ésto no acabara.
Con el tiempo pudimos acostumbrarnos a la sal, lo amargo, encontramos fuerzas por el piso de la playa, por la arena, por el sol. Aprendimos a ignorar cortes, golpes, ardor, palabras.
Y aunque las temperaturas nos hicieran delirar entre nuestros diálogos al final la noche caía y con eso el orgullo, nuestras miradas al agua que teníamos por el pecho y los puños hechos que rodeaban al otro, también pidiendo disculpas por aflojar nuestro agarre.
Nuestras súplicas idénticas hacían eco entre olas; por favor no dejes que la marea nos lleve.