Notes

Mi nombre es Isidora Kayla Waldgrave, tengo 22 años. Nací el 9 de Febrero de 1993 en Inglaterra y me vine a los 5 años a Los Ángeles debido a la pelea que enfrentaron mis padres desde ese entonces. Por una parte, mi padre biológico llamado Jacob Waldgrave, era un hombre que no cumplía con las reglas y nunca, pero nunca para mí fue un padre como parece; él ni siquiera me saludaba o me abrazaba cuando llegaba a casa porque decía que tenía mucho trabajo por hacer y por algún motivo siempre llegaba de mal humor, cosa que a mí mucho no me convencía para nada verlo de esa forma agresiva. Se ve que mi padre andaba en cosas raras de negocios con otros tipos de por ahí y bueno, prefiero parar ahí el tema de él. Por otra parte está mi madre, Hannah Debbie, mi mujer encantadora, la madre que me protegía desde pequeña. Ella siempre ha protegido de mí por cualquier cosa y le tengo un cariño enorme. Ella fue la que decidió separarse de mi padre porque sabía que él se metía en cosas extrañas y que sabía que tarde o temprano ocurriría algo entre los dos; justo habían discutido un día y mi padre comenzó a golpearla... no sabía si había tomado o qué, pero es inexplicable. En fin, mi vida ahora luego de tanto tiempo de esperar, empecé a hacer amistades nuevas aquí; quería socializar con la gente y obviamente con mis amigos cercanos también, quería olvidarme de todo por buen tiempo hasta que los días pasaban y de a poco logré sentirme bien conmigo misma y también con mi vida. Durante mis relaciones amorosas salí dañada como siempre, y pues mi primer pareja me amenazaba por verme salir con amigas o amigos fuera de casa y me prohibía salir de su hogar cuando yo tenía que ir siempre a visitarlo o pasar tiempo con él. Luego mis otras parejas no supieron valorarme; me engañaban y así sucesivamente.
Tenía problemas con el alcohol por el tema del "amor" y casi siempre terminaba camino al hospital. Era algo que se volvía adicto en mí que no podía quitármelo de encima hasta que hace meses logré deshacerme de la bebida alcohólica. El año pasado decidí adoptar a una pequeña niña apenas de 10 años y con ella soy la madre más feliz. Ella logró cambiar mi vida por completo y logré olvidarme de todo los recuerdos oscuros que viví aquí desde hace muchísimo tiempo atrás. En fin, no mucho por contar. Ahora tan sólo vivo con mi madre, mi hija y mi prima Katie en Los Ángeles y tengo mucho por planear más adelante.