Notes

Entonces los cerebros de hombres y mujeres están conectados de manera diferente – pero no es tan simple




Reducir un estudio científico sobre enfermedades mentales a la psicología pop, sugiriendo que hombres y mujeres provienen de planetas diferentes, no nos hace ningún favor a todos

Hombres y mujeres. A veces nos miramos a los ojos y pensamos: "Sois más inexplicables conmigo que una de esas criaturas que se arrastran por el fondo del océano" En relaciones de todo tipo, hombres y mujeres a menudo terminan exasperados por la irracionalidad percibida no sólo de la persona con la que tratan, sino de todo su género. https://ps6.blob.core.windows.net/blog/escortsbogota.html mujeres que dan "la perspectiva femenina". Las revistas femeninas publican artículos que dicen a sus lectores "lo que realmente piensan los hombres", como si la copia final hubiera sido aprobada por todos los tipos del mundo sentados juntos tomando una cerveza en su estudio del sótano. En una nota más oscura, la "batalla de sexos" se esconde detrás de la mutilación genital femenina, el abandono de niñas por parte de quienes quieren niños o el tráfico de novias jóvenes. Con demasiada frecuencia, el otro género debe ser elaborado, comprendido y luego, para algunos, derrotado.

Un nuevo estudio de la Universidad de Pensilvania parece haber añadido más leña al fuego "Los hombres son de Marte, las mujeres son de Venus". Revela, en palabras de Ragini Verma, el profesor asociado que dirigió el estudio, "una marcada diferencia – y complementariedad – en la arquitectura del cerebro humano que ayuda a proporcionar una base neuronal potencial sobre por qué los hombres sobresalen en ciertas tareas, y mujeres en otros". Esto ha sido recibido en algunos sectores de los medios como confirmación de nuestra inherente alienación mutua. Sus hallazgos han sido – y serán – tomados y aplicados a la psicología pop, no a la ciencia, que es para lo que sus arquitectos lo pretendían.

Cuando hablé con el profesor Rubén Gur, uno de los académicos encargados de la investigación, me dijo que era muy importante que la gente entendiera que "estamos hablando de promedios". Continuó explicando que el estudio se centró en los problemas de salud mental en niños y adultos jóvenes y que, debido a que hombres y mujeres son, en promedio, más susceptibles a algunas formas de enfermedad mental que otros –, por ejemplo, los hombres a la psicosis y las mujeres a la depresión – era importante realizar algunas investigaciones relacionadas con el género. Este estudio, entonces, tiene que ver con el diagnóstico y tratamiento de diversos tipos de enfermedades mentales. No se trata de decir que a los amantes les gusta leer mapas y a los pájaros les gusta tener charlas delicadas. No se trata, como Gur se esforzó en señalar, de dividir a hombres y mujeres.

A menudo, las personas sienten la necesidad de respaldar sus prejuicios o suposiciones con cualquier ciencia antigua que puedan encontrar. Después de todo, las mujeres eran vistas como demasiado histéricas para que se les permitiera votar, y los científicos serían expulsados para dar fe de ello. También hay una diferencia entre cómo están conectados nuestros cerebros y cómo nos sentimos y nos comportamos. Estas cosas a menudo caen en el territorio del psicoanálisis, que es muy difamado por quienes prefieren agrupar a toda la humanidad en categorías. Quizás sea reconfortante pensar que la amplia y aterradora gama de emociones que todos sentimos puede reducirse a si orinamos de pie o sentados. Sin embargo, hacer eso no le haría ningún favor a usted ni a la buena gente de la Universidad de Pensilvania.



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