Notes

Hoy me encontré con un fragmento de mi pasado y no supe si llorar por lo malo que me pasó o sonreír por la persona en que me convertí. No tengo la certeza de si alguna vez les habrá pasado; leer detenidamente un texto, sumergirte poco a poco en el y ver como dentro de tu cabeza se relata un gran libro. Te abrazas a el como si quisieras aferrarte al recuerdo de ese momento plasmado dentro de sus letras y signos, sintiendo al mismo tiempo una profunda nostalgia.Yo conozco esa sensación de encontrarse estancado al borde del precipicio, y leer aquellos escritos que los realizaba mientras sentía depresión o alguna tristeza me hacen recordar a mi verdadero ser. Cada vez que los leo detenidamente reviven pequeñas historias, reproduciendo una película, que yo la cree con pequeños pensamientos que algún día los escribí. De mi pasado, solo quedan letras, momentos que podre vivir en mi mente, leyéndolos despacio, con cuidado y sin prisas, para sumergirme en el mar de mis recuerdos y aventuras vividas. Los textos fueron mis confidentes para escapar de la realidad y así liberarme de cualquier cargo que me este torturando. Y ahora lo único que sé es que siempre regreso a mi pasado y si quieren saber de el es preciso decir otra mentira, les diré que llegue de un mundo raro, que no se del dolor, que triunfe en el amor y que nunca he llorado.