Notes

Te extraño. Extraño tus palabras y tus silencios. Extraño tus miradas y tus ausencias. Todo eso que me resulta tan familiar, y al mismo tiempo tan extraño. ¡Cómo me acostumbré a vos, y a tus maneras! Todo lo que decís parece un verso, compuesto exclusivamente para mí. Necesito esas palabras como el aire que respiro, para volver a tener los pulmones en su lugar. Si es que tengo pulmones, creo que los estoy perdiendo de tanto suspiro enamorado. Descubriste que debajo de esta caparazón de mujer fuerte, hay una mujer. Una mujer! nada más, y nada menos. Descubriste la belleza de mi cuerpo y de mis palabras. Me descubriste un mundo nuevo, maravilloso e inaudito, con mil emociones que no conocía. Con vos cada día representa una aventura, simple y deliciosa, y que quiero disfrutar a tu lado. ¿Que si te quiero? ¿Cómo no querer a mi novio del alma, que me recorre el cuerpo a besos? ¿Cómo no amar a ese hombre indescriptible que me acaricia con palabras, que me enciende de deseo con una simple insinuación? Ni todo el dinero del mundo puede pagar el roce de tus labios con sabor a miel.