NotesWhat is notes.io?

Notes brand slogan

Notes - notes.io


Querida Audrey,

Para que conste: no eres tonta por dejarme saber que estás pensando en mí, qué has soñado conmigo y que echarme de menos te está volviendo loca a veces. Parecerá tan aleatorio como tirar un dado lo que acabo de decirte, pero a continuación, a medida que avances en las palabras escritas aquí, sabrás las razones por las que las dije a ti.
Este es el tercer día que me encuentro escuchando una sola misma canción. [https://rb.gy/c8jk5p]
Lo estoy haciendo desde que ésta llegó a mí, sin previo aviso otro día. Y como la piedra lanzada por David a Goliat, me ha golpeado justo en el centro de la frente de mi alma. Estaba a punto de bañarme en la ocasión y siempre lo hago con la música a flotar por la estancia cuando la misma apareció en mi pantalla mental — lo único que sabía y lo sentía en mis huesos era que en aquél momento necesitaba escucharla, y supe por qué me apareciste tú en el pensamiento, conectada de alguna forma a esa canción.
No es la primera vez que una canción me habla de ti ni la primera que señala algo relacionado contigo. La música a menudo me ha estado hablando de ti con frecuencia — quizás porque tenemos ambos una conexión con este tipo de expresión artística — e incluso sugiriendo su estado anímico, porque sueles dejarme una ventana abierta para que pueda yo mirar a través de ella y saber cómo te estás sintiendo, incluso si todavía no puedo cruzar la puerta o saltar por la ventana y juntarme a tí. Estamos conectados como si compartiéramos de una misma alma. Y en cierto modo lo compartimos.
Por supuesto, el pensamiento de que podría de que mi persona haya estado recogiendo emociones de fuentes distintas a las suyas o incluso distorsionando las me cercan me ha saludado. Sería insensato de mi parte descartar esa posibilidad. Pero no siento que ese sea el caso. Que esté recogiendo emociones aleatorias o de los míos.
La había oído antes en ocasiones anteriores a esta canción. Una bellísima canción — una de mis favoritas de la intérprete marroquí-canadiense y su colaborador estadounidense cuyo trabajo es igualmente apreciado por mi persona, aunque no la haya escuchado en tiempos. Los talentos combinados cuando hay un intercambio positivo de energía duplican su tamaño. Cómo el amor se duplica en tamaño cuando los corazones laten al unísono. Probablemente también la hayas escuchado antes. Me parece que encaja con tu tipo: de esas para escuchar y permitirse sentir con el alma.
Ya eres consciente de mi admiración y encantamiento por tu gusto personal, bien recuerdo haberlo expresado abiertamente otra ocasión, encontrarlo atraente a mis ojos, pero nunca me parecerá suficiente hacerlo. Hablarte de eso y todo de tí que tanto fascínio ejerce sobre mi ser. Así que perdóname si me vuelvo repetitivo. La verdad es que la repetición es uno de los detalles que me configuran. Mientras otros escuchan un álbum completo, yo puedo escuchar la mismísima canción durante horas e incluso días o una semana. Mientras que algunos ven una película una o dos veces, puedo llegar a ver veinte en un corto espacio de tiempo. Como la película Ghost Ship, dirigida por Steve Beck de Thirteen Ghosts, por ejemplo. Recuerdo el encanto que tuvo sobre mi alma cinéfila amante del terror la trama de la primera. Vi esa cinta tantas veces que la inevitable separación casi se volvió insoportable, ya que la había alquilado en la tienda. Y aparte de la trama, no podía dejar de mirar a Emily Browning. Debo haberme enamorado de Browning ese día, porque no podía apartar los ojos de la niña con el vestido blanco y el lazo en el cabello que ella encarnaba. En esta época ni siquiera imaginaba qué estatura vendría ella a ostentar en el futuro. Tal vez tenga predilección por las mujeres bajitas. Eres tú la prueba viviente — un llaverito lindo.
Nunca me parece suficiente expresar fuera de los prados de la mente, donde suelo hablar contigo con considerable frecuencia, cuánto te quiero y amo a tí y los detalles que te conforman el ser. Vaya, ¿te diste cuenta? Lo dice. Repetitivo como un reloj. Puedes que no seas una de esas personas a quienes el tic-tac del reloj agrada y tranquiliza, en lugar de ponerles agitados, en este caso seríamos compañeros de club, pero me alegra que mi «tic-tac» no te aburra. A propósito, en especial en momentos como este del año, en el que la sensibilidad auditiva puede unirse a mí para ponerme al día con la conversación, el sonido hecho por un reloj me llega reconfortante.
De vuelta a la canción y rumbo a la conclusión de esa sesión.
Todavía la siento, la canción, aferrada a los revestimientos de mi corazón como un marcapasos. Incluso mientras escribo estas líneas — que incluso antes de que lleguen a ti, ya no me pertenecen sino a ti — aún me veo a escucharla, me robó una lágrima solitaria cuando la escuché hace tres días, y mi corazón vertió mares y ríos junto a ella.
Tengo tanta hambre como el mundo de empatía cuando se trata de ti, kalon.
Ha pasado un tiempo desde que me he referido a tu persona directamente de esa manera. Recordé la primera vez que vine a referirme a ti de esa manera. Sucedió sin que yo lo sintiera. Cuando me di cuenta, ya se había expresado, saltando de la mente . Nunca me preguntaste por qué — y nunca se me ocurrió hasta ahora que saqué las redes de pescar de las aguas de la memoria, llegando a ese trato cariñoso, certificarse de que conocieras mis razones. Creo haber imaginado que podrías saberlo. A decir verdad, yo mismo no conocía todas mis razones. Pensé conocer, sin embargo el significado de ésta era tan solo la punta de un iceberg de una razón más grande. ¿Recuerdas cuando hablamos sobre cómo nos habríamos conocido dentro de un contexto narrativo involucrando nuestras historias individuales? He tenido percepciones de nuestra historia de vez en cuando desde aquél día y las vengo registrando tan luego se me presentan, permitiéndoles revelar sus formas a su tiempo.
Desafortunadamente, estos insights inspiratorios no se podrán presentar en la forma tradicional de un juego de rol — finalmente miré hacia un abismo donde una oscura verdad que no quería enfrentar me esperaba para estar listo para enfrentarla.
No puedo estar presente por mucho tiempo durante una narración colaborativa en tiempo real. Por mucho que mi corazón haya construido los cimientos de su intención sobre ese deseo. Solo puedo permanecer y que sea lo que es y no lo que yo quiero que sea cuando los escribo en solitude con mis pensamientos dirigidos a mi contraparte narradora — en este caso tu persona. Por eso aún no hemos tenido un momento completo, solo innumerables fragmentos de ellos. Mi presencia aparentemente no es lineal, y todo me llega de la misma manera, desordenada, haciéndome necesario permitirme reorganizar sus estructuras barajadas en el tiempo que no es mío ni ajeno. Tiendo a tener fuertes dolores de cabeza si desobedezco esta extraña regla bajo la cual me encontré a la merced después de un autoanálisis que he estado haciendo desde que tuve la impresión de que había un peculiar pero real patrón en todo esto que todavía me muestro aún incapaz de desentrañar de todo. Cuando puedo ver el panorama general, me doy cuenta de que muchas cosas tienden a quedar al margen, como una foto después de pasar por una ‘cortante’ experiencia con la trituradora, necesito pacientemente juntar cada fragmento y armar el rompecabezas. Más aún en esta época del año, que por alguna razón, he notado tras un minucioso análisis un patrón energético, por así decirlo, intensificado que me ha intrigado desde que pude percibirlo actuando sobre mí y deslizándose, incluso en el que me vino a adoptar: el gato. La partida se vuelve inevitable. Pero no me cabe duda de que nuestro amor todo lo puede. Así que por favor no pidas el divorcio, tenemos dos hijos oníricos que criar, sin mencionar los nuestros de cuatro patas. Aparentemente somos padres de una niña. [https://rb.gy/5zswki]
En caso de que no sepas por qué me he referido a tí de «kalon» en anteriores ocasiones: es una palabra cuyo significado yace tanto en «corazón» como «coraje» en bretón. Desde el ámbito griego, el significado de esta palabra gira en torno a lo «bello» y lo «noble». También hay este término hawaiano que se inspira en el dios del cielo y sus cualidades y significa «cielo». En suma, la estuve llamando «kalon» porque tienes la belleza, la nobleza y el coraje incorporados al código del alma. Y porque eres — como lo tienes — mi corazón. Y me transmite la misma paz que el cielo cuando todo más es caos. Y recientemente descubrí que esta palabra me vino a la mente porque se relaciona con una vida pasada nuestra dentro de nuestra historia narrativa. Incluso he estado trabajando en un cartel a medida que se me presentan las intuiciones.
Siento cuando estás triste amor, tu preocupación; el agotado mental o físicamente. Los momentos en el que te sientes perdida y te quieres encontrar fuera de la tormenta. Logro alcanzarte en esos momentos, pero no de manera que puedas verme, tocarme, sin embargo me puedes sentir con todo tu ser. Una forma nada justa, en especial para tu persona. Lo que me recuerda la ocasión en la que aceptaste ser la Clare Abshire de mi Henry DeTamble. Ante todo lo que se te ha presentado hasta hoy, ¿te arrepientes?
Sé que has estado pensando en mí. Sé que has estado preocupada por mí, y el temor de que en algún momento, algún día, no vuelvas a saber de mí, vino a tomar un café contigo. Lo sé, sé que has querido sentirme a mí tan cerca de ti como la ropa que abraza las curvas del cuerpo que tu espíritu anima más veces que tus pestañas valsan. Tú también estás en mi mente siempre y también he estado preocupado por ti. Más aún cuando me llegan estas canciones y un puñado de señales más de que has necesitado de mis brazos para hacer girar el mundo en un abrazo. Pero, por supuesto, deseo estar equivocado. Quiero que quieras mi abrazo y no lo necesites porque no te sientes bien. ¿Qué marido querría eso a su esposa? En una reflexión más profunda, ignore la oración anterior. En una reflexión más profunda, ignore la oración anterior. Algunos esposos quieren esto, pero no estamos en ese contexto. Puede que estemos en un contexto con vibraciones inclinadas hacia Dear John por mi ausencia, pero no en el contexto de adaptaciones basadas en la obra de Patrick Hamilton. Tengo al menos eso y otros atributos a favor mío. [https://rb.gy/k27sny]
Bromas aparte.
Ojalá pudiera hacerme más presente para tí, fuera de los sueños compartidos y los pensamientos coincidentes. Del corazón — tuyo — que ha albergado este amor infinito que poseo y te profeso con devoción. Desde que nos [re]conocimos, he estado tratando de hacerlo, pero el éxito en ese departamento simplemente se ríe de mis vanos intentos de hacerlo de otra manera, de ser diferente al respecto. Quedarme. Regresar a ti. Cuando coincidimos, en algún momento mi mente me lleva en diferentes direcciones que no me llevan a ti en cuerpo y no me permiten agarrar tu mano para que no seas arrebatado de mi presencia. Una forma irónica de expresar ese fenómeno, ya que soy yo quien siempre se va. No es la primera vez, y mi historial me advierte que no será la última. Razón por la cual te lo mencioné sobre, cuando volvimos a hablar después de noviembre de dos mil diecinueve. Cuando el deseo perenne es estar a tu lado, lo único que he logrado es, aunque no siempre, retrasar la partida lo más que puedo.
Sé que tu comprensión se hace siempre presente. Sé que sabes que no estoy ausente por placer. Sé que lo sabes. Sin embargo, el conocimiento de que no lo hago con deliberación no debe neutralizar todo lo que una ausencia tan larga y frecuente puede desencadenar en un corazón. Lo cierto es que en realidad vinculaste tu amor a una versión real de Henry DeTamble y ser Clare fuera de la ficción puede resultar frustrante, aunque la comprensión esté presente y el amor y la felicidad venga a coronar los reencuentros. Es natural sentir sentimientos de antítesis al respecto. Sobre todo, estando enamorada de alguién como mi persona. Estás de hecho a caminar en campos minados en el que a nuestra relación se refiere. Y lo siento por eso.
Tengo una confesión que hacerte:
Cuando parto de tu convivencia, parto también parcialmente de mí mismo. Como si me hubiera bifurcado el espíritu, y me encontrara mitad dentro y mitad fuera del cuerpo que mi espíritu anima en esta vida actual y sin que me encuentre apto a reunir estas partes mías a mi propia voluntad, en mi propio tiempo. Hay una especie de barrera energética que se espesa a mi alrededor, separando a mí mismo de mi propio ser. Como si fuera una sombra de quien suelo ser contigo, cuando me veo lejos y una sombra no puede iluminarse a sí misma. Aunque, me consuela el hecho de que al menos he logrado encender las sombras ajenas con la vela de mi intención. La primera vez que identifiqué conscientemente este fenómeno fue en el año dos mil diecinueve.
Los míos desconocen la existencia de lo que te estoy informando, salvo una sola alma. Pero ella tiene dos hijos más además de mí y sus propios problemas con los que lidiar. Uno de ellos es echarle demasiado de menos su baile. Ser admirada por su elegancia y desenvoltura en un salón de baile, lugar donde suele brillar, donde las cabezas se vuelven en su dirección para seguir sus pasos y los de su pareja de baile.
Nuestra madre vive conmigo y he estado actuando como su cuidador debido a episodios misteriosos que vendrían a derribarla al suelo como va a la lona un luchador de MMA si mi persona no estuviera cerca, Por lo general, cuando ocurren los temblores que empiezan en uno de sus brazos, lo mismo brazo, siempre, los cruzo en una X sobre su pecho y le vengo a abrazar el cuerpo hasta que pasen los temblores que configura el primer síntoma de una serie que he aprendido a identificar de lejos. Y si posible, evitar.
Soy el refugio y apoyo de nuestra madre, su mejor amigo, consejero y lo más cercano a conocerla entre los hijos que tiene. Soy el guardián de los secretos más profundos de su corazón, al menos de los que me han sido revelados directamente por ella. Soy con quien tiene tantos chistes internos que no cabrían en un solo libro. El que sabe de antemano que algo anda mal con solo una mirada a su rostro. El que ocasionalmente termina actuando más como una figura paterna que como un hijo. Básicamente, soy el Randall Pearson de la Rebecka Pearson de nuestra madre.
Sin embargo, por mayor que sea nuestra afinidad anímica, y por mucho que compartamos la misma fe en la espiritualidad, algo me impide revelar a nuestra madre esos ciertos detalles de esta extraña experiencia en la que he estado inmerso. Traté de hacer esto algunas veces, desde que comencé a identificar un patrón, pero en cada ocasión pude sentir que su energía repelía mis intentos de ser abierto al respecto. Y normalmente no soy abierto sobre mis tormentas personales. No soy una puerta. La mayor parte del tiempo soy una pared y para obtener una apertura de mi parte, necesita uno de un mazo de paciencia como Mjölnir para que eso suceda. No soy una puerta. Pero contigo soy un prado, un océano, el cielo. Todo, excepto, una pared.
Así que empecé a guardarlo para mí todo eso. Lo poco que sabe mi Rebecca hace que el temor por mi cordura se encienda en sus ojos y yo sienta su energía inclinándose hacia la preocupación por mí. Pero prefiero la preocupación a la irritabilidad de su parte, que veo con igual claridad debido a lo que acompaña uno de mis regresos a mi mismo y no solamente a tu persona. Nuestra madre no lograría entender todas las señales espirituales que he estado recibiendo cuando «regreso» o cuando estoy a punto de hacerlo. Los números gemelos, las intuiciones que me llevan a anticipar acciones que sólo se muestran necesarias en el momento siguiente. Mi conexión profundizada con los animales. Mis reflejos dignos de esos memes que involucran a Spiderman, aunque socialmente la lentitud llega a estar presente dentro de una habitación con más de dos personas, incluyéndome a mí en este dúo. Por supuesto que pensaría que me estoy volviendo mentalmente inestable. Pero la lucidez se hace presente a cada paso que oferto a este viaje que no comprendo del todo ni elegí. Quiero encontrar una manera de sustraer los efectos secundarios de esa situación.
En el momento de mi regreso a mí mismo y a tu persona, necesito retirarme del convivio con los míos, de ver a mis hermanos y sobrinos, por todo lo que implica esta época. Al menos mientras todavía estoy tratando de entender lo que está pasando. Los más jóvenes de mis sobrinos tienen la energía burbujeante y coloridamente intensa. No entienden por qué no puedo conectarme con los juegos habituales, razón para que venga a sugerir algo de naturaleza menos compleja que lo que solemos hacer juntos. Los invito a jugar juegos analógicos, dibujar diseños basados en sus temas actuales favoritos, jugar un juego de algún juego de teléfono móvil, como Stumble Guys. Que veamos una película. Los mayores parecen sentir que algo está fuera de lugar, pero no sabrían qué decir sobre ni entenderían si se lo dijera yo a ellos lo que se está pasando.
El otro día llegó a casa nuestra hermana, había mandado un mensaje y no obtuvo respuesta aún así vino. Toda la familia tiene la costumbre de salir de la nada como que brotando desde la tierra tal cual un zombi en la casa ajena, incluso si no reciben un retorno de una auto-invitación. Para alguien como yo que disfruta tanto de las sorpresas como de dar golpecitos con el dedo meñique en la esquina de un mueble, esto es tan placentero como el beso ardiente intercambiado entre el dedo y el mueble. Mi sobrina había ido a una fiesta de cumpleaños de una amiga y mi sobrino quiso venir a pasar la tarde conmigo, jugando. Porque como sabes soy de esos tíos/padrinos. Ese día hice lo que no suelo hacer cuando estoy lejos de mí, porque pienso en mis sobrinos. Le dije a nuestra hermana que el día no era propicio para él quedarse conmigo. Ella no reaccionó bien. Ni siquiera me habría permitido explicar los motivos si yo no le hubiera dicho a ella que esperara y me dejara hablar. La confusión de mi sobrino de seis años era evidente. El enfado de nuestra hermana, tan visible como la Estatua de la Libertad. No soy dado a las conversaciones instantáneas, ya lo sabes.
Los períodos de insomnio regresan junto con los presagios de mi regreso.
De nada servía decirle a ella que no tenía el teléfono móvil cerca en la ocasión del mensaje, porque estaba cuidando a los animales. Que estábamos, nuestra madre y yo, pasando por un período de insomnio colectivo aquella semana, como si estuviéramos anclados juntos a un hechizo inverso al de la Bella Durmiente. Que se despertó nuestra madre sintiéndose un poco enferma ese día y por fin descansaba. De mi parte necesitaba de algunas horas de sueño para quitar los dolores de cabeza que me estaban matando y dormir era la solución. En la noche de aquel mismo día, recibí un mensaje de voz por parte de mi hermana, disculpándose. No estaba enojado con ella. Estaba triste por el desarrollo de la situación y frustrado por tratar de expresarme y no encontrar la elocuencia que me caracteriza porque los dolores de cabeza y las palabras que quería no me llegaban en el tiempo justo que yo las necesitaba. A esto se suman algunos lapsos de memoria seguidos instantáneamente por el recuerdo del objeto olvidado, como si la parte de mi espíritu estuviese afuera le susurrara a la parte que está adentro la respuesta correcta. En estas ocasiones, activo alarmas en el teléfono móvil para no caer en un sueño continuo. Además del gato, tengo a mi cuidado una perrita de la edad tan vieja como la abuela de Sid de La Era de Hielo y un perro adolescente activista, que suele protestar dándole cabezazos en el techo de su casita como si fuera el techo una campana y al empujarlo con el topo de su cabeza quisiera dejarme saber que me echa de menos y desea estar conmigo, no por las galletitas. El gato parece extrañamente conectado conmigo en estos momentos de lo que ya suele ser. Los mismos saltos que suelo tener en esas ocasiones cuando estoy dormido, los tiene él. Parece que estás peleando grandes batallas espirituales por mí.
Mi hermana, se podría decir que tiene un tercer ojo ciego, no ve nada con relación a la espiritualidad, pero sabe de su existencia, aunque se niega a sí misma ese conocimiento. Mi hermano abraza esta sabedoria a través de la lente de su religión, pero su mente se centra únicamente en las causas terrenales, no en el panorama general que involucra ambos planos en los que está incrustada la realidad. Cree que estoy agobiado por razones terrenales, como un espejo de su propia realidad.

Uno a uno, varios electrodomésticos dejaron de funcionar este año en poco tiempo. La pantalla de una computadora dejó de funcionar una noche mientras trabajaba en algo relacionado con nosotros y se negó a volver a encenderla, no hasta el siguiente día. Hace un minuto, una ventana de navegación se abrió sola, llenando la pantalla con su contenido: el Spotify, donde me encuentro todavía escuchando aquella canción a la que me referí al comienzo de esta carta con vibraciones enciclopédicas.
Estaba editando y preparando una foto de Ewan McGregor para ti, cuando apareció una imagen diferente de él mientras estaba editando otra, simplemente se abrió. Estaba en la lista de cuatro que había descargado, pero aún no trabajaba en eso.
Todos estos eventos me recordaron otros, como tenía reacciones similares a la luz eléctrica cuando era adolescente, como si fuera Eleven de Stranger Things. Las luces a veces parpadeaban mientras estaba en un dado ambiente — afortunadamente sin regularidad —, como si alguna otra energía estuviera actuando sobre ella.
Una noche normal y silenciosa de mi juventud — el anciano hablando — pasado en mi propia compañía. Yo tenía alrededor de dieciséis años, todos los demás estaban ausentes. Estaba frente a la pantalla de la computadora cuando fui testigo de cómo tiraban la impresora, como si la manejada por manos invisibles. Recuerdo mirar la escena y levantarme con calma para recuperar la pobre impresora maltrecha y devolverla a su lugar. Se hizo la señal de la cruz y la actividad que a la que anteriormente me dedicaba fue retomada. Quienquiera que haya hecho eso no obtuvo la atención que quería de mí, y no volvió a manifestarse de esta u otras maneras. Incluso en mi adolescencia, más de una computadora ha dejado de funcionar en diferentes ocasiones sin motivo aparente, mientras yo las estaba usando. Los dispositivos de música también se unieron a esta creciente lista. Sin embargo, sentí que algo quería alejarme de aquella tecnología en particular. Y por lo que sé, puede que aún lo esté intentando, ya que dos computadoras móviles corrieron la misma suerte mientras trabajaba en la infame carta que nunca se envió. Sí, aquella carta. La que nunca llegaste a reposar los ojos. Tres años de espera por una carta y ni es una carta proveniente de Hogwarts. Pero ella vendrá a ti un día. Recuperé su esencia y desde entonces la dejo fluir en la dirección que el viento de su voluntad la lleve. Debería haberte imaginado y preparado mejor para lo que tendrías que enfrentar al elegirme. Pero nuevamente, esto sucedió porque me negué, postergué, no senté con mis sombras. No las invité a calentarse en las llamas de mi atención plena.
Para que no tengas nunca que esperar a saber cómo estoy, cuando me veo de regreso a tu compañía, Hadita, llevo yo siempre el cuerpo y la mente nutridos mientras el alma y el corazón se encuentran perfectamente hidratados por el néctar del amor y la gratitud — dos de los principales aceites que lubrican los engranajes de la vida.

Tá mo chroí istigh ionat.

Siempre tuyo,
Darko.
     
 
what is notes.io
 

Notes.io is a web-based application for taking notes. You can take your notes and share with others people. If you like taking long notes, notes.io is designed for you. To date, over 8,000,000,000 notes created and continuing...

With notes.io;

  • * You can take a note from anywhere and any device with internet connection.
  • * You can share the notes in social platforms (YouTube, Facebook, Twitter, instagram etc.).
  • * You can quickly share your contents without website, blog and e-mail.
  • * You don't need to create any Account to share a note. As you wish you can use quick, easy and best shortened notes with sms, websites, e-mail, or messaging services (WhatsApp, iMessage, Telegram, Signal).
  • * Notes.io has fabulous infrastructure design for a short link and allows you to share the note as an easy and understandable link.

Fast: Notes.io is built for speed and performance. You can take a notes quickly and browse your archive.

Easy: Notes.io doesn’t require installation. Just write and share note!

Short: Notes.io’s url just 8 character. You’ll get shorten link of your note when you want to share. (Ex: notes.io/q )

Free: Notes.io works for 12 years and has been free since the day it was started.


You immediately create your first note and start sharing with the ones you wish. If you want to contact us, you can use the following communication channels;


Email: [email protected]

Twitter: http://twitter.com/notesio

Instagram: http://instagram.com/notes.io

Facebook: http://facebook.com/notesio



Regards;
Notes.io Team

     
 
Shortened Note Link
 
 
Looding Image
 
     
 
Long File
 
 

For written notes was greater than 18KB Unable to shorten.

To be smaller than 18KB, please organize your notes, or sign in.