Notes

Las diferencias entre un centro de spa y un balneario

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En contraste a los balnearios, la nueva generación de centros de hidroterapia no utiliza el agua medicinal, sino que aprovecha sus propiedades mecánicas (por servirnos de un ejemplo, el masaje con chorros), térmicas (mediante diferencias de temperatura) o relajantes. Los baños y circuitos urbanos ofrecen tratamientos basados en la hidroterapia, que aprovechan las propiedades físicas del agua.
Por consiguiente, es muy importante distinguir entre los balnearios y los baños termales (comúnmente llamados balnearios urbanos), pues en los balnearios, además de las técnicas de hidroterapia basadas en los efectos térmicos y mecánicos de los baños termales, el paciente asimismo se favorece de los componentes mineromedicinales del agua.

Si bien el agua termal está presente en los balnearios, cosa que no ocurre en los urbanos, los dos tienen objetivos comunes, como activar la circulación sanguínea, combatir el estrés y aliviar determinados problemas musculares.
Balneario
Conforme la Asociación Nacional de Balnearios, los balnearios son establecimientos que disponen de aguas minero medicinales declaradas de interés general, un servicio médico e instalaciones convenientes para realizar los tratamientos prescritos. La base de un balneario es el uso de agua mineral termal. Se ubican cerca de la fuente de la que proceden y aprovechan las propiedades químicas y físicas del agua. Si bien son similares, cada género de agua tiene propiedades diferentes para nuestra salud. El agua de calcio se aconseja para el sistema digestivo, el agua diurética para reducir la presión arterial sistólica, el agua de magnesio para favorecer la función renal y la vasodilatación, el agua de bicarbonato para estimular la actividad pancreática y el agua de flúor para la formación de los huesos.
¿Para qué enfermedades se aconseja el agua mineral terapéutica? Desde enfermedades dermatológicas, reumatológicas, nefríticos y circulatorias hasta enfermedades inquietas y circulatorias. Múltiples tratamientos, como la ducha fría, favorecen la circulación sanguínea y mejoran la respiración, el baño termal romano tiene un efecto relajante sobre el sistema muscular y inquieto, y la ducha escocesa favorece la circulación sanguínea.
Tanto en los balnearios como en los baños termales, la meta común es conseguir beneficios y mejorar la salud mediante la acción del agua o el uso de esta para activar la circulación, combatir el agobio, calmar el dolor... mas las diferencias entre los dos, que analizaremos más adelante, son esenciales.
La principal diferencia se encuentra en el agua utilizada. Al tiempo que un balneario usa el agua potable de la red pública, un balneario tiene su agua mineralizada de manantial con propiedades saludables que cambian conforme la fuente y la composición. Esto quiere decir que un spa ha de estar ubicado en la fuente o cerca de ella para utilizar el flujo de agua con fines terapéuticos.


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