Notes

Observa varias cosas sobre uno de los juegos mas potentes el Dayz

Después y tras un largo periodo de acceso anticipado, DayZ por fin ha salido a la venta. Y, bueno, las cosas no han alterado mucho. Hay algo tranquilizador en el hecho de que DayZ prosiga siendo DayZ, con sus controles torpes, sus zombis con errores y su voluntad de hacer la supervivencia lo más difícil posible. Es un poco absurdo que en una versión 1.0 aún haya problemas que persisten desde los días de la alfa. Mas francamente no aguardaba mucho más. Para bien o para mal, este es el juego que recuerdo.
Todavía debes recorrer quilómetros para encontrar a tus amigos. Los zombis siempre y en toda circunstancia se atascan en las paredes o no se fijan en ti. Puedes recorrer toda una urbe en busca de provisiones solo para encontrar una chaqueta sucia, un abrelatas y ninguna lata. Y la probabilidad de ser asesinado por un francotirador invisible es siempre alta, por norma general a los pocos segundos de hallar algo bueno. Cuando menos esas malditas escaleras han sido finalmente reparadas. Los jugadores más experimentados recordarán el dolor de subir una escalera y fallecer inexplicablemente al final.
El mapa de Chernarus es una vieja república soviética y está repleto de miseria.
Si todo esto suena un poco miserable, lo es. Por instantes, el juego es más agotador que cualquier otro juego de supervivencia. Cada vez hay que administrar menos indicadores -sed, apetito, temperatura, etc.- y la escasez general de artículos puede hacer que la supervivencia sea un verdadero calvario. No hay nada más desmoralizador en DayZ que caminar kilómetros hasta un pueblo y encontrar que todas las puertas están abiertas: una señal segura de que alguien ya ha estado allí y indudablemente ha saqueado el lugar de arriba a abajo.
Pero encaja con la atmosfera agobiada y melancólica del juego. El mapa, Chernarus, es una antigua república soviética y gotea de miseria. Uno tiene la sensación de que, incluso antes de la llegada de los zombis, habría sido un lugar desapacible para perderse. Pero asimismo hay una belleza sosegada, sobre todo en las onduladas tierras de labranza, los densos bosques y los tranquilos pueblos rurales. Es una ambientación fantástica, y un cambio bienvenido respecto a los familiares escenarios occidentales blog post-apocalípticos que acostumbran a encontrarse en estos juegos.
La mayor concentración de jugadores acostumbra a estar cerca de las ciudades y las bases militares -donde se suele encontrar el mejor botín-, lo que significa que puedes moverte de forma libre por la naturaleza. Cuando juego a DayZ, estoy continuamente en movimiento, viajando entre urbes, lugares turísticos y otros puntos de interés, cogiendo lo que encuentro y evitando los inconvenientes si es posible. Pero eso significa un montón de compras poco exigentes. Hay vehículos, pero de forma frecuente faltan piezas de repuesto o comburente, y encontrarlos puede convertirse en un auténtico reto para un jugador a solas.
La naturaleza sandbox del juego quiere decir que para la mayoría de los jugadores lo principal será "equiparse": encontrar un arma, munición, vendas, comida, bebida y quizás un bonito casco o algo así. Pero cuanto más acumulas, más nervioso se vuelve el juego, por el hecho de que sabes que estás a un paso de un superviviente de gatillo simple o de un troll rencoroso de perderlo todo. Me gusta mucho esta idea, porque da un sentido a la muerte. Cuando mueres, te devuelven sin más a un punto de inicio aleatorio sin equipo y, como sabes, cada resolución, sobre todo si hay otros jugadores, está cargada de riesgo.
Empecé a sospechar de otros supervivientes, hasta el punto de volverme deseoso y paranoide.
La auténtica emoción de DayZ, y la razón por la que jugué cientos de horas tanto del mod como de la versión independiente, es la sensación que tienes cuando inevitablemente te encuentras con otro superviviente. A día de hoy, todavía se me acelera el corazón cuando, al explorar una urbe o caminar por el desierto, veo a otro jugador delante de mí. En ocasiones, si bien hoy en día es menos usual, te hacen señas para que bajes a conversar amistosamente y a tomar unas judías. O te avisarán de que un grupo de bandidos (jerga de DayZ para los jugadores que matan a otros jugadores) está en el próximo pueblo.
Pero probablemente te dispararán si te ven. entra aqui ello. Tal vez sencillamente gozan matando gente. Tal vez quieran su presa. O, y esto es lo que me pasó a mí, el juego les ha transformado en una persona horrible. Solía ser afable. Me acercaba a la gente, la saludaba y le afirmaba hola. Les daba consejos o les preguntaba si necesitaban ayuda. Pero tras múltiples casos de personas que fingían ser amistosas y luego me apuñalaban por la espalda (literalmente) o me atraían a una emboscada, comencé a sospechar de otros supervivientes hasta el punto de volverme deseoso y paranoide.
Dicho esto, es excelente. Esto es lo que hace de DayZ un juego multijugador tan atractivo y adictivo, para mí mucho más interesante que PlayerUnknown's Battlegrounds. En este género de juego, la única interacción con las personas es el disparo. Pero en DayZ, cada encuentro con otro jugador es una historia. Si bien te roben, te esposen o te vejen, es algo que recordarás. A propósito, asegúrate de jugar con un micrófono. Si no reaccionas en voz alta cuando alguien te saluda o te ordena hacer algo a punta de pistola, probablemente te van a matar.
No he citado los zombis pues es lo menos apasionante del juego. Lo que puede parecer extraño en un juego sobre el apocalipsis zombi. Cuando no están bloqueados en el fondo, corren sigilosamente hacia ti y a veces desaparecen, como si tu conexión a Internet no pudiese seguirles el ritmo. Entonces, en el momento de disparar a un zombi o golpearlo con un arma cuerpo a cuerpo, no hay ninguna sensación física.
Pelear contra un zombi es como pegar un holograma. Los combates son realmente pobres y no hay sensación de reto o satisfacción. Indudablemente, son mejores que en los primeros tiempos del juego para un solo jugador, pero solo por un poco. El resultado es que no hay que temer a los muertos vivientes, sólo son molestos. En un instante del mod, los zombis no funcionaban en lo más mínimo, lo que me gustó aún más pues nada se interponía en el núcleo del juego: la interacción entre los jugadores.
Trataba con gente inteligente, no con drones de IA a los que podía engañar fácilmente.
DayZ es un juego difícil de criticar, porque la mayoría del tiempo es bastante desganado. Hay largos tramos en los que no pasa nada; se deambula por campos supuestamente interminables, no se encuentra nada en las ciudades y nunca se halla otra ánima. Pero lo que te mantiene alerta es saber que algo increíblemente emocionante puede estar ocurriendo a la vuelta de el rincón. Un tiroteo con un grupo rival de supervivientes en una urbe destruida. Una pelea de cuchillos con un rival armado. Alguien que no te haya visto, a fin de que puedas acercarte sigilosamente, clavarle un hacha en la espalda y robarle la bonita chaqueta que lleva. Oye, no me juzgues. Es una locura ahí fuera.
Estos instantes de dramatismo son fugaces, mas en el momento conveniente pocos juegos son tan apasionantes como DayZ. Y como en EVE En línea, saber que todo (excepto los zombis) está bajo control por el jugador es una sensación muy especial. En el momento en que un grupo de delincuentes te atrapa y te birla, no se trata de un suceso guionizado por un desarrollador: lo imagina una persona real y pensante, y eso hace que la experiencia sea realmente mejor. En un enfrentamiento -mi mochila estaba llena de provisiones duramente ganadas, mi amigo yacía sangrando en una esquina, dos asaltantes se escondían en la distancia- la emoción era impresionantemente alta. Estaba tratando con personas inteligentes, no con drones de inteligencia artificial a los que podía mentir de forma fácil.

Mas entonces volvía a correr por los campos, buscando provisiones, sin hallarlas, muriendo y volviendo a comenzar, una y otra vez. DayZ solo se vuelve verdaderamente interesante cuando conquistas un punto de apoyo y logras localizar suficientes suministros y armas para defenderte y mantenerte con vida. Pero llegar a ese punto es a veces completamente desmoralizante, y es entonces cuando bastante gente abandona. Es un juego en el que hay que esforzarse mucho para lograr algo, e inclusive así puede ser arrancado de forma inmediata si se comete un error estúpido o si un jugador decide disparar sin ninguna razón en particular.
De cuando en cuando, en pequeñas dosis, DayZ es de los mejores juegos multijugador de PC. Pero la mayor parte del tiempo es un lío lento, hastiado, frustrante y tortuoso de bugs, IA zombi defectuosa y combate ingrávido. Así que no sé muy bien qué meditar. Ciertas historias que produjo este juego quedarán grabadas para siempre en mi memoria, y eso es una cosa que vale la pena festejar. Pero también es malévola, embrollada e desconsiderada con tu tiempo. Si buscas una experiencia de supervivencia social sin concesiones en un planeta atmosférico, puede que merezca la pena echar un vistazo a DayZ. Pero si buscas un juego sólido y complejo que siga haciendo lo que se supone que debe hacer, te defraudó.


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