Notes

Divino ser que llenó de luz mi mundo al aparecer en mi vida. Fuiste sin duda una presencia inesperada pero bien recibida. Además; ¿quién podría negarse a tener a alguien fuera de este planeta a su lado? Nadie. Ponte a recordar junto a mi, empezamos siendo dos completos desconocidos que simplemente admiraba al otro, que sentía vergüenza por hablarle y que, cuando yo di el primer paso, ninguno quiso dejarle ir. Porque fue cuestión de horas, de simples palabras locas para que se volviera importante. ¿Te das cuenta de cómo las cosas han cambiado, verdad? Parece ser que al final, es cierto aquello que dicen y es que cada quien tiene lo que merece. Aunque bueno, no es cierto. Porque yo no te merezco, sin embargo, te atesoraré cada día de mi existencia. La razón es simple: porque lo vales. Quiero guardarte sólo para mi, para ser yo el único dueño de tus sonrisas, para ser yo la única persona que se deleite con tus risas, para poder admirar tus ojos cada anochecer y poder escuchar tu voz ronca al amanecer. También para poder ser yo quien entre tus brazos se encuentre e inclusive en tus sueños, se haga presente, para hacerte compañía incluso en tus pesadillas. Porque te he prometido hasta el cansancio que nunca vas a estar solo. Estamos juntos en esto. En todo. Hoy ya se cumple un mes. Un mes de un suceso significativo (aunque no es precisamente el que se cree). ¿Sabes? Dicen que conforme pasa el tiempo, los "te amo" más significativos son aquellos inesperados. Entre más tiempo se lleva al lado de alguien, más te darás cuenta de que es mejor hacérselo saber no sólo con palabras, sino con pequeñas acciones en el día a día. Quizá una flor, una carta, prepararle la comida, hacerle un halago sobre lo bien que luce su cabello. Hasta el ser humano más insensible del mundo, pierde la cabeza cuando es tocado por el sentimiento absurdo del amor. Recuerdo como nos burlábamos de aquellas madrugadas en donde nos poníamos cursis con el otro. Ahora, recapacita bien la situación. En la actualidad, esperamos que ese momento llegue. Pero no es como si nos quejáramos alguna vez, porque este sentimiento que parece querer salirse de nuestro pecho, es la cosa más perfecta del universo. Te amo.