Notes

Fabbro: Siempre he sido de palabras precisas, ésta vez me propuse a que no sería la excepción. Te aprecio mucho, Desiré, puede que no lo parezca por todo lo que hice y por lo que quizá vuelva a hacer, pero lo hago. Hace muy poco, en realidad, te dejé en claro que no deseaba estar en ningún tipo de relación seria, y sin embargo, siento que ésta semana vengo fallandome a mi mismo, y la verdad es que no hay lealtad más grande que la que yo mismo me tengo, por eso no debo dejar las cosas para más. Me equivoqué antes por hacerte sentir mal y me equivoco ahora por darte ilusiones que ni yo me creo. Eres asombrosa, te lo he dicho varias veces, pero sigo sin quererte de la forma en la que tú me quieres a mi. Necesitas a alguien que valga la pena, y no me estoy desmeritando, sencillamente considero que yo no valgo tú pena. Anteriormente, no conocía la forma correcta para dejarte saber las cosas, y aún así intenté ser lo más sutil y amable posible, pero no lo aceptaste, así que debo decirte que no te vi, no te veo y puede ser que no te vea a futuro siendo esa mujer que batalle conmigo codo a codo. No lamento no poder sentirlo de la manera en la que quisieras, tan sólo lamento haberte creado falsas ilusiones.
Yo: Es estúpido que me haga la enojada o algo similar, sí, estoy dolida pero que más da. Gracias por crearme un ilusión bonita y siempre supe que no estuve a lo que sería tu alcance de mujer. Eres un buen chico por sobre cualquier cosa y a pesar de cualquier actitud errónea que hayas tenido, supe apreciarte y tenerte paciencia. Espero que consigas a esa persona que te cambie los papeles y te haga feliz. Ten una buena vida, Fabbro.