Notes

COMANDANCIA GENERAL DE W.
ÁREA DE SEGURIDAD
POLICÍA LOCAL
Asunto: investigaciones en un domicilio para averiguar una desaparición de una mujer.

Comisario Floyd Council:
El día 3 del presente mes me dirigí -juntamente con mi subalterno, el agente Pink Anderson- al domicilio 22 de la calle T., cercana al edificio de correos del centro de la ciudad. Nos dirigimos allí por la desaparición de una mujer llamada V. R. hacía una semana, aproximadamente. Ya habíamos ido allí cuatro días antes, pero fue para confirmar la denuncia de la desaparición.
Cuando llegamos en el coche patrulla, nos sorprendió no ver ninguna luz encendida pese a que eran las 7 de la tarde. Llamamos a la puerta y nos abrió el marido. Actuó de una manera muy cordial ante nosotros, e incluso nos invitó a tomar el té -lo cual denegamos-.
Comenzamos a preguntarle por su mujer: sus aficiones, conocidos, alguna posible pelea que tuviesen... No llegamos a ninguna conclusión. Lo que sí pudimos sacar en claro es que le afectó mucho un incendio que sufrieron un mes atrás, que se sumó a la pérdida de su gato.
Mientras el agente Pink seguía preguntando al marido, decidí mirar los muebles y la decoración de la casa: no había demasiada debido al reciente incendio, pero nos extrañó que no hubiese cocina en ningún lugar del domicilio; sin añadir que solo había camas individuales, algo extraño para alguien que ha perdido a su mujer hace tan solo una semana. Tras mi paseo por las habitaciones volví al salón, donde mi compañero estaba teniendo problemas para conseguir información interesante. Le pregunté al dueño dónde cocinaba, y me respondió que tenía la cocina en la bodega. Decidimos ir a ver.
Efectivamente, en la bodega solo había una cocina y una chimenea -además de unas pocas botellas de vino y güisqui-. Inspeccionamos cuidadosamente el lugar sin encontrar nada de una mínima importancia.
Nos decidíamos para marchar cuando el dueño del domicilio nos mencionó lo bien construida que estaba su casa mientras daba algunos golpes a los ladrillos de la pared. No sabría decir qué pasó, pero un sonido brutal y profundo tronó en la sala, provocando que los tres nos quedáramos helados; el estruendo provenía de la pared.
El agente Pink y yo comenzamos a retirar ladrillos de la pared más cercana a nosotros. Tras un minuto de maniobra vimos algo espeluznante: en un hueco de la pared se hallaba un cadáver de una mujer con el cráneo destrozado, sobre el cual se encontraba un gato tuerto y negro.
En ese mismo instante apresamos al marido de la mujer acusado de su asesinato.

Fdo. Comisario Floyd Council en 5 de abril de 1854.