Notes

LA ESPADA PAYASAL
PKMN Goromoiz
________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

CAPÍTULO 1: KENFU


Kenfu retrocedió al ver la mirada tétrica de Belord, su hermano. Belord cogió la espada clavada en el suelo mientras susurraba las palabras ''poder''.

-¡Detente, Belord!-Le gritó Kenfu, pero Belord no respondía y seguía dándole la espalda a su hermano.

-Quita del medio...-Le amenazó Belord después de unos instantes sin mirar atrás.

-¿¡Te has vuelto loco!? ¡¡Mira lo que le has echo a este bosque!! ¡¡¡Todo está en llamas!!!

-¡He dicho que te quites del medio!-Rugió Belord y se giró. Sus ojos se volvieron completamente negros y una aura violeta intensa le rodeó. Su voz se volvió como la de un demonio. Belord caminó lentamente hacia su hermano y le cogió del cuello. Le levantó del suelo... Y finalmente le tiró contra un gran árbol. Cuando Kenfu se chocó contra el árbol, éste se rompió. Kenfu perdió las fuerzas que le quedaban.

-B-Bel... Lord...


**********************************


-¡Rito! ¡Despierta Rito!-Le sacudió la mujer del panadero-. ¡Te has quedado dormido en vez de trabajar! ¡Y cuesta creer que tú salvaste el mundo de la hecatombe esa...!

-¿Qué ha pasado? ¿Eh?-Preguntó sorprendido Rito bostezando-. Es que he soñado que me montaba en un unicornio que tiraba móviles del cu...

-¿Móviles? ¿Qué son los móviles? Si sigues diciendo tonterías como ''móviles'', no servirás de nada-le regañó el panadero que salió con una bandeja llena de pan.

-Oh... ¡Bueno! ¡Dejo el trabajo!-Decidió Rito y se fue saludando con un ''hola'' en vez de despedirse.

-¡Amur! ¿¡Qué te dije que contratar a un niño de ocho años como ese no nos serviría de nada!?-Regañó la mujer del panadero al panadero (Amur).

El día era soleado y apenas habían nubes en ése cielo azul. Rito alzó la vista y se le cayó el gorro de bufón negro y lila con cascabeles (reales) que habían en sus puntas, cosa que se agachó y lo recogió. Después empezó a gritar ''Wii'' sin parar... Y se fue a la entrada del imperio (que a la vez era la salida): tenía un portón levadizo y un puente que se podía alzar. Los guardias se lo quedaron mirando y le preguntaron que qué hacía. Rito no respondió, aprovechando que el portón levadizo estaba alzado, se ''escapó'' del imperio por un par de minutos; se fue a la caravana de la ruleta de la fortuna que había en las afueras... Pero como que sólo consiguió una piruleta, se fue al campamento de misioneros a hablares mucho:

-¡¡Oh, no!! ¡¡¡ES RITO!!! ¡¡¡ESCONDEOS!!!-Les avisó el misionero que lo vio correr. Los dos misioneros que escucharon la advertencia se escondieron, mientras que el que avisaba, cuando intentó esconderse, Rito le preguntó: ''¿Estás jugando al pía-pía conmigo?''-. Sí, sí... Y los demás... Están ahí...-Respondió sudando y bajando la cabeza.

-¿¡PERO POR QUÉ SE LO DICES!? ¡¡QUE NOS DESTROZARÁ CON SUS PREGUN...!!

-¿Eh?

-... Con sus... Sus... TUS... ''Preguntutuos''...-Se apresuró a decir el segundo misionero, Juk.

-''Preguntutuos'' quiere decir ''pía-pía'' en latín...-Intervino el tercer misionero, Buk.

-¡Sí! ¡He oído que el rey te busca!-Le avisó el primer misionero, Xuk.

-¿Ah, sí?-Interrogó Rito con una mirada seria, pero luego vio a un anciano que estaba andando dolorido hacia el portón levadizo del imperio-. Adiós.

Rito corrió hacia él gritando ''wii'', pero justo cuando llegó, ése anciano se cayó en el suelo y se desmayó.


*********************************


El anciano se despertó en una mazmorra con su túnica blanca casi rota. Se acarició la barba y se levantó. Los guardias, al verle, le llevaron hacia el rey Josefino de Corazón, que estaba con Lealusfielus Tonticus, su leal y fiel mayordomo, y Rito, con su cabello azul enorme y su gorro de bufón puesto, con unos pantalones lila fuertes, una camiseta azul fuerte y una gabardina verde.

-¿Quién eres?-Le preguntó Rito acercándose a él.

-¿Eh?-Soltó el anciano en voz baja y examinó a Rito-. ¡¡RITO!!

-¿¡CÓMO SABES TÚ SU NOMBRE!?-Le preguntó el rey sorprendido.

-Rito es la creación ''bufónica'' de Joker Jack y Juan el Payaso; por lo tanto, Rito quedará con 8 años siempre... Hasta la eternidad... Sí...-Explicó ése anciano misterioso.

-Saludos-saludó Lealusfielus haciendo una reverencia y el rey le dio la mano levantándose de su trono. Rito no hizo nada-. ¿Cómo es que ha llegado hasta aquí con esa pinta? ¿Es que se perdió por el continente?

-No... No... No es nada de eso...-Explicó el anciano-. Me llamo Kenfu y no he venido hasta aquí por equivocación... Para que entendáis todo esto, os lo explicaré todo, desde el principio hasta el final.
>>Mi hermano Belord era el mejor general de nuestro antiguo imperio. Obviamente, yo también lo era... Pero no era nada en comparación con él; era el mejor, sin duda. Él era el comandante que dirigía el ejército hacia nuestros enemigos, y yo era el guardián de nuestro imperio. Nunca perdimos... Siempre acabamos ganando en todas nuestras batallas... Pero algo cambió por completo a Belord.
>>Un día le vi con un señor con una barba negra y una piel pálida... No me acuerdo mucho de su indumentaria, pero creo que iba de negro.
>>Le pregunté a Belord que quién era ése hombre, y me dijo que nos llevaría hasta el poder supremo y me lo tomé como una broma, así que no le hice caso... Pero un día, se empezó a comportar de manera muy extraña. En vez de hablar bien y perdonar, hacia a lo contrario. Empecé a temer por él.
>>Una noche de tormenta salió él solo armado hasta los dientes y corrí detrás de él. ¿No os he dicho que soy un maestro con la magia blanca? Pues ni siquiera pude hacerle nada con mis poderes.
>>Corría más rápido que yo, así que lo perdí de vista... Pero lo vi salir de un templo que más tarde acabó destruyendo con tan sólo una espada maligna con un aura realmente oscuro... E incendió todo el bosque.
>>Estaba cansado, pero en cambio, él no parecía débil. Sus ojos se hicieron completamente negros y me atacó... Pero bloqueé sus ataques hasta que ya no pude más y dio un rodillazo tremendo en el estómago; luego se giró y me obligó a que me fuera... Pero no me fui... Y después de eso, Belord me lanzó contra un árbol que se rompió por culpa de mi impacto... No me desmayé, así que cuando Belord desapareció dejando detrás suyo un humo negro, vine hasta aquí, caminando sin dormir durante 2 días...

-¡¡¡¡WOOOOOOOOOOO!!!!-Gritó alucinado Rito.

-Bien... Bien... ¿Y?-Aplaudió el rey, que le encantó lo que le contó Kenfu (quería escuchar más... Pero le daba vergüenza decírselo).

-Pues que he venido hasta aquí por éste niño-Kenfu señaló a Rito-. La espada que tenía en sus manos era la Espada Payasal, una espada que sólo los bufones, payasos, arlequines y mimos son capaces de manipular... Así que él salvará a mi hermano poseído por esa espada...

-Creo que moriré-se rió Rito poniéndose rojo.

-Puede descansar aquí por 7 días... Y cámbiese de ropa; mis sastres le harán una nueva túnica. Pasados siete días, tendrá que marcharse y salvar a su hermano.

-Oh, si no salvemos a Belord, él dominará el mundo...

-¡Sí! ¡Descanse!-Le dijo Lealusfielus.

Kenfu se fue a dormir en la habitación que le dejó el rey. Rito no creyó lo que pasaba: después de 4 años de la salvación de la Gran Hecatombe Mundial, otra aventura le esperaba.
Pasados siete días, Kenfu se cambió y se puso una túnica negra, con un chaleco de cuero verde y unos brazales lilas; unos pantalones de mago verdes y unas sandalias marrones, y, Kenfu y Rito, se prepararon para irse a a salvar a su hermano... Y posiblemente, el mundo.

-Continuará...-