Notes

Admito que jamás me he considerado bueno al expresar las cosas que siento por medio de cartas como esta, prefiero ser espontaneo cuando esos instantes se dan, seguro eso lo sabes; creo que simplemente termino por esparcir en una hoja muchas ideas desordenadas, pero la intención siempre es lo que va a valer. Puedo apostar que mientras lees esto, yo estoy leyendo tu carta, muriendo de amor por ti mientras tú ríes justo por estas palabras absurdas que, sinceramente, no deberían ir en una carta de amor, por llamarla de alguna manera. Pero no importa mucho, me gusta hacerte reír, me gusta escucharte reír y si logré que eso ocurriera entonces estoy haciendo las cosas bien.

Quiero que sepas que escribo esto escuchando canciones que me recuerdan a ti, a mí, a nosotros y todo lo que hemos pasado desde ese 31 de enero en el que te conocí por pura casualidad (o destino, quien sabe). Pienso en ello, en esa fecha, en el año pasado y me parece grandioso el hecho de que siempre terminaba volviendo otra vez a ti, a tus brazos que se sienten como estar en casa, donde siempre me sentí realmente valorado, cuidado y seguro. Porque sí, tú puedes creer y jurar que yo no pensaba en ti cuando no estábamos juntos o que te veía como un amigo cuando volvíamos a reunirnos, pero la realidad es que siempre fue todo lo contrario. Charles, yo siempre pienso en ti.
¿Recuerdas esa noche que te dije que siempre has sido algo así como mi debilidad? No recuerdo las palabras exactas, así que no puedo citarme, pero la idea de lo que trataba de comunicarte es lo más real que he admitido, claro, después del amor que siento por ti.

Hemos hablado estas cosas muchas veces ¿Cierto? Lo que hicimos cuando no estábamos juntos, lo que sentimos, lo que vivimos, cómo lo vio cada uno de nosotros por separado, pero siempre vale la pena recordarlo porque nuevamente estamos juntos y todo eso valió la pena, claro que lo valió.

Yo estaba roto cuando te conocí, había cosas a las que le tenía miedo, algunas que no había superado y tan poco amor propio que habría sido capaz de permitir que me pisotearan sin realmente importarme demasiado, de hecho, creo que dejé que eso pasara muchas veces y en el proceso dejé que te pisotearan a ti, lo lamento mucho, pero crecí como persona y a eso me refería el otro día en que he cambiado, porque ahora no permitiría que nada ni nadie te dañara, eres tan importante en mi vida, uno de los tesoros más valiosos. Aunque te cueste creerlo, tú eres una parte fundamental de ese cambio, porque con tu paciencia (que a veces logro que se esfume, también lo siento por eso), con el amor que sientes por mí y me demuestras día con día, me curaste tantas heridas que eso que me lastimó en el pasado ahora parece insignificante. Ojalá yo pudiese hacer lo mismo por ti, porque juro que haría lo que sea con tal de sanar todas tus heridas y hacer de tu corazón, que es precioso, algo sin igual.

Y la verdad es que hay tanto que te tengo que agradecer, por más que siempre me dices que no lo haga, así como me dices que no me disculpe por los pasados meses, pero debo hacerlo. Este día es tan importante para mí, porque estoy viviendo un sueño, lo que siempre quise tú me lo estás dando, haciéndome tan feliz que no hay medida para ello. ¿No te pasa que no sientes que solo sea un mes? ¿Que en realidad todo lo malo se redujo a nada y que los meses siguieron su cuenta luego de esos ocho que compartimos el año pasado? Porque yo sí; nos quedaron las enseñanzas, pero lo malo es insignificante si lo comparamos con lo que ahora es nuestro, es decir, todo ese amor que nos tenemos.

Si tuviese que definir lo que significas para mí tendría que decir tan simple y rápido como: lo eres todo. Porque es así de sencillo, todo, sin ti siento que me quedaría sin nada, a pesar de que presumo de que no depende de nadie mi felicidad, admito que gran parte de ella es gracias a ti y no es algo que me moleste o avergüence, porque ¿sabes? Has hecho por mí más de lo que cualquiera, mantienes mi corazón feliz, a mí me haces suspirar y siempre pensar en lo bello que se dibuja mi futuro al compartirlo contigo.

Gracias por amarme, por tus atenciones, por preocuparte constantemente por mí; gracias por la familia que estamos formando, gracias por ser mi compañero, mi confidente, mi amante, mi amigo y mi novio; gracias por enojarte conmigo cuando hago y digo tonterías, gracias por sostenerme cuando las cosas se ponen complicadas. Gracias por tanto que realmente me quedo corto de palabras y solo se me mete la idea de besarte hasta que te quede clara la idea que quiero plasmar aquí.

Si me lo permites, planeo hacerte feliz desde hoy hasta el resto de nuestras vidas.

Pd: no me robes más propuestas, la próxima la haré yo.