Notes

El propósito de esto es sacarte al menos una sonrisa. Sabes todas las cosas que hemos pasado juntos, desde que nos conocemos, hasta hoy, debe haber pasado más o menos, ¿año y medio? Nunca imaginé que llegarías a ser tan, pero tan importante en mi vida. Nunca pensé que te volverías vital para mí, menos que decir que no podría vivir sin ti. Es tanto el amor que te tengo, que cuando tú sientes dolor lo siento yo también. Sí, cuanto sufres o te siento decaído automáticamente mi ánimo decae. Pero n lo hago notar porque en casi todas las ocasiones lo sé manejar, y pienso en cómo hacerte sentir bien. Es lamentable pensar que no lo consigo siempre, pero hago mi mayor intento, lo aseguro. Yo he podido ver muchas facetas tuyas, desde tu felicidad hasta tu depresión o enojo. Es un privilegio que te abras a mi, que confíes. Andy, eres... Eres tan especial, único e incomparable. Sé que no solo soy yo la que piensa así. Y quizá porque te conozco un poco más que los demás es que me gustas así, no sé, eres tan inigualable. No he conocido a nadie como tú. Y por ser de esas pocas personas que valen la pena y lo valen todo, no mereces el sufrimiento. No sé si ya te lo he dicho, pero si tuviera la oportunidad de cambiar y que tu tengas la poca pero suficiente felicidad que poseo y yo tu tristeza la tomaría sin pensarlo dos veces. Porque no aguanto no poder hacer nada para ayudarte, no poder sacarte de ese agujero, no poder curar tus heridas. Me gustaría que te des cuenta de lo bueno que te rodea y notes que no vale llorar o sentirte dolido. Si bien es cierto, el dolor es humano, claro que sí. Pero es más difícil cuando no sabes manejarlo, ¿verdad? Si me dejaras curarte las heridas lo intentaría, pero te cierras tanto que es prácticamente imposible. Mi amor, eres tan débil pero tan fuerte a la vez. ¿Y sabes? Saldrás de esta. No hay dolor que dure mil años, ni cuerpo que lo soporte. Y yo estaré aquí para sostener tu mano cuando caigas, te levantaré e impulsaré a continuar. Si estás cansado té llevare en mi espalda hasta que puedas caminar. No te aferres a lo que te daña. Acepta que es hora de pasar y seguir. Todo está en ti, en tu fuerza de voluntad. ¿Complicado? Claro que lo es. Te habla una persona que creyó que el mundo se le acababa cuando terminaron con ella. Y mírame ahora. No es imposible. Andrew Duncan, eres de las mejores cosas que me pasaron en la vida, y ni vida entera, mi complemento, mi otra mitad, mi persona favorita, el pedazo de cielo que me faltaba. Una sonrisa tuya vale oro, tú vale oro puro. Atte: tu arte. Solo tuya por siempre.