Notes

　　 　　 　#ActivitéOn #Howsoreverpg #UneAutreChance
　　 　　　 　　　 　　#PatitoActivité.

　　 　　　 　　　 　　　 　　#throwback;
　　 　　　 　　　 　　　 　　　 　　‹ Cerrado; 00:00am. ›

La amistad que mantenía con un amiga de la infancia era poderosa. Ambos estudiaron juntos, se conocieron cuando apenas Jaebeom salía del cascarón. Heather, era una famosa youtuber, la cual era muy popular en el país que este vivía, Canadá; Jaebeom sabía el tipo de persona que su gran amiga era, graciosa, optimista, risueña y que lo había hecho reír gran parte de su vida. Siempre estaba agradecido con ella, y con su familia, puesto que esta era muy unida, y eso al cantante le agradaba. Los encuentros entre ambos eran consecutivas, puesto que Heather, ya le agradaba la idea de grabar un programa en compañía de ella, Jaebeom, si bien era parte del grupo 2PM, líder y cabezilla del grupo.

Jaebeom había recibido una llamada de su gran amiga, acordando el encuentro, lugar, y la hora en los que ambos estarían presente junto a otras personas quienes se encargarían de la producción, entre otras cosas más para ambos. El americano no rechazaría el encuentro dado este ambos se verían antes y disfrutarían de una charla tranquila, al igual que lleno de risas. El encuentro ya había sido hecho, Heather, desde siempre llegaba antes que él, una cafetería cerca de la ciudad y sin mucha gente los interrumpiera.

　　 　　– Al fin llegaste, Jay.
　　 　　– Lo lamento, el tráfico.
　　 　　– No te preocupes, deberías comprarte un carro.
　　 　　– La compañía no me lo permite.
　　 　　– Pues, déjame hablar con ellos.
　　 　　– No es necesario, se necesita de responsabilidad.
　　 　　– ¿Lo de siempre?
　　 　　– Ya me conoces.


Ante la desaparición de su compañera, Jaebeom se mantuvo concentrado en el paisaje que los protegía, árboles, pájaros que pasaban y cantaban su vez, el clima había sido agradable para el cantante, ya que detestaba el exceso de calor. Los momentos junto a la muchacha, cada uno de éstos llegaban a su mente, logrando captar y recordando lo vivido con la menor de seis hermanos, nunca pensó que aquello seguiría en pie, puesto que ambos eran distintos en cuanto a carácter y aún así se llevaban bien.

　　 　　– Nada mal, pequeño Jay.
　　 　　– ...
　　 　　– ¿Jay?
　　 　　– ¿Qué pasó? Aquí sigo.
　　 　　– Lo mismo me pregunto yo, aquí tienes.
　　 　　– Lo siento andaba perdido en el espacio, gracias.

Se había quedado casi nulo y además un susto ante la reaparición de Heather en la mesa en donde ambos habían optado por sentarse. Procuro en todo momento estar sobrio, puesto que si bien estaba por tener una grabación, las charlas con la menor eran siempre sin sentido, de lo único que podía compartir con ella era simple y llanamente de ropa, y/o música. Heather muy contenta se dio el tiempo de explicar cada una de las facetas y lo complicado que era su trabajo, Jaebeom, muy atento asentía mientras daba pequeños sorbos del vaso que este contenía, café muy espeso. La tarde estaba ya por caer, y ambos finalmente decidieron salir del lugar, puesto que estarían en un hora acotada.

Había recordado que la muchacho tenía auto, a lo que comprobó al verla acercarse a su auto, cambiado y por supuesto de color. Rápidamente con mucha confianza subió al auto, en el asiento del copiloto, Jaebeom, sin ningún tipo de permiso, se acomodó en su asiento, colocándose el cinturón de seguridad, al igual que la trigeña y arrancar. La música nunca podía faltar cada vez que el cantante subía a un auto que no era de él, puesto que no le gustaba el silencio, música hasta un cierto tope y disfrutar de la misma.

Los minutos pasaban y no eran para arruinar su día un gran tráfico, Jaebeom maldijo, echando a reír junto a su gran amiga. Por mera curiosidad, Jaebeom bajó del auto dando aviso que iría a comprar algo de beber, ¿Era en serio? Probablemente, su compañera en el auto, el rapero cruzó del otro lado de la calle sin darse cuenta del auto que venía, ante el grito de su compañera por el aviso, Jaebeom volteó rápidamente, sin sentir que el vehículo estando cerca de él, chocara contra su cuerpo y que este mismo golpera con el capó y la fuerte ventana del frente, no tardando en segundos el cuerpo del ya cantante y líder del grupo estuviera en el piso desmayado y sin tipo de razón.

　 　　 　　 　　 　　 　　 　　°　°　°

La noticia para sus familiares había llegado en cuestión de segundos, no podía hacer nada hasta que Jaebeom despertara y contara lo sucedido, sus ojos se fueron abriendo poco a poco una gran luz desde arriba lo enfurecía, su vista le fallaba, los dolores en el cuerpo le fastidiaban. ¿Qué había pasado? No demoró en ver a una de las enfermeras en uno de sus costados, mientras una muchacha desesperada, lo miraba preocupado. Su rostro de desprecio y además de confusión lograron asechar dudas sobre si mismo. Voces por todos lados, enfermos, ¿Qué hacía él ahí? No podía explicárselo.

　 　　 　　– Jaebeom, ¿Cómo te sientes?
　 　　 　　– ¿Jaebeom? ¿Quién eres tú? ¿Por qué diablos estoy aquí?
　 　　 　　– Tuvimos un accidente, soy Heather, la pequeña Heather.
　 　　 　　– ¿Heather? No te conozco, por favor, llevénse a esta muchacha de aquí.

Con la voz cargada, y enfurecido pidió que retiraran a la muchacha quien muy preocupada lloraba, Jaebeom sin entender nada seguía preguntándose, cómo es que había llegado hasta allí, qué había pasado, tantas preguntas pasaban por su mente que seguía sin creer, la cabeza le explotaba, inyecciones, pastillas, tantos medicamentos que no quería beber. Estaba inconsciente. ¿Había sido aquel muchacho que Jaebeom por momentos recordaba? Sus recuerdos no le favorecían en nada, pedía ayuda, y pistas de lo que había pasado, que accidente, lo único que él quería era desaparecer, salir de dicho lugar e ir hacia donde todo pasó, ¿Cómo es que llegó en ésas condiciones? ¿Dónde estaba su familia? Tal vez y estaban preocupados por él.

　 　　 　　– No tengo hambre, no insistas.
　 　　 　　– Debes de comer, aunque sea esto y el resto, no.
　 　　 　　– ...
　 　　 　　– ¿Sigues sin recordarme?

Jaebeom era demasiado terco, las preguntas aún permanecían, su mirada por largos segundos se flechó en la muchacha y con el rostro lleno de lágrimas. La seriedad abundaba desde ese entonces, Heather, permanecía a su lado, su mirada seguía perdida, desviándose en una de las ventanas que daba hacia la calle y donde se oía el pasar de los autos, corridas, etcétera. Su memoria se detuvo, logrando como es que lo llevaba a como sucedieron los hechos, en donde veía a una muchacha gritar, corriendo y pidiendo auxilio, con las mismas características de aquella que lo cuidaba. Volviendo a la realidad, pudo finalmente recordar de que aquella muchacha a quien el cantante trataba mal, era su amiga de años, aquella que donde corrió y abrazó con todas sus fuerzas, sin tener el más mínimo pudor de llorar, y suplicarle que no lo abandonara.