Notes

Capítulo 1.

Estaba siendo una mala semana, ya llevaba dos días encerrado en el calabozo con solo un sorbo de agua por día, mi lengua ya estaba reseca y áspera, y todo por robar un par de manzanas del mercadillo. De repente, un soldado del rey, abrió la puerta y me dijo que me fuera antes de que cambiara de opinión, al salir la luz del sol me dejó aturdido.
Ya sabia donde dirigirme, como cada martes por la noche en un callejón se encontraba un local donde se organizaban combates entre varios grupos y el ganador recibía una buena cantidad de monedas, yo que no tenia dinero para entrar en el local y realizar mis apuestas subía al tejado del establecimiento y observaba los combates a través de un pequeño agujero. Esta noche no sabia quien se enfrentaba ya que llevaba dos días un poco descolocado del tema, al llegar escuche un murmullo un tanto peculiar y decidí subir rápidamente a mis escondrijo. Un grupo local llevaba tres combates consecutivos ganados pero de repente aparecieron unos hombres encapuchados con trajes negros, entraron en el cuadrilátero y se creó el silencio, en un abrir y cerrar de ojos los guerreros negros se ordenaron y atacaron con unos ataques coordinados perfectos, con tan solo un par de golpes lograron tumbar el último hombre que quedaba en pie, nadie dijo ni una palabra, un hombre de negro, el más alto en este caso cogió a un local y lo levantó con los dos brazos dejando le caer contra su rodilla y partiendo le la columna y matándole al acto, se quitó la mascara y saco una mueca de su rostro. Aterrorizado, intenté marcharme de ese lugar con la mala fortuna de meter el pie en el boquete y caí en medio de la zona de combate, el hombre de negro se sorprendió, y me preguntó mi nombre.
- Me llamo Álbur.
- No deberías haberte metido por aquí muchacho, ¿No sabes que este lugar no es para mocosos como tú?
- Lo siento señor no pretendía molestar...
- Demasiado tarde chico ya lo has hecho...