Notes

Escribiré esto como un “para él” y no como un “para ti” porque sé que habrán muchos chismosos leyendo esto y riéndose de lo cursi que voy a ponerme, pero no importa. Disfruten leyendo.

Hoy fue mi boda. Hoy me uní en matrimonio con mi persona favorita en este mundo; para amarlo, cuidarlo y estar a su lado hasta que la muerte nos separe.
Sé que soy malo expresando mis sentimientos, que muchas veces me da pena y, aunque él me entienda y me espere, siempre intento recordarle lo mucho que lo amo, que lo extraño cuando no está y que me encanta todos los días desde el once de noviembre de dos mil diecisiete.
Hoy, cuando se lo dije mientras nos tomábamos de las manos, con todos ustedes presentes y un significado aún más profundo que antes, pude decir que nunca había sido tan feliz en mi vida. Él me hace feliz, él me enseñó a ser feliz y a disfrutar más de las pequeñas cosas. Él me esperó cuando no estuve listo y me dio todo el amor que pudo desde el día en que nos conocimos, hasta hoy y por mucho más. Él es una de las mejores personas que alguna vez llegué a conocer. Si no lo conocen y sólo leen esto por pura curiosidad, deberían saber que es alguien con quien vale la pena hablar y encariñarse. Tanto su forma de pensar como su personalidad valen oro y no se hacen una idea de lo afortunado que me siento por tenerlo a mi lado y poder llamarlo esposo desde hoy.
Ambos sufrimos mucho antes de estar juntos. La pasamos mal, tuvimos malas experiencias. Cuando ya estaba rindiéndome en el amor, él apareció y cambió toda mi perspectiva. Él tomó mis pedazos uno por uno y los juntó hasta poder abrazarme para que no me rompieran más. Él me amó y me protegió desde el primer día, tuvo paciencia conmigo y se tomó el tiempo de aprenderse cada pequeño rincón de mí y todo lo que puedo llegar a pensar o sentir, e incluso me dejó ver lados de él que quizá nadie nunca había visto con el único propósito de dejarme hacer lo mismo y que ambos fuéramos aprendiendo del otro día a día.
Puedo decir firmemente que no hay cosa que no ame de él. Amo cuando viene y me deja mil mensajes estando emocionado por algo, amo cuando suelta esos comentarios sarcásticos que me hacen reír; amo cuando simplemente está ahí, riéndose conmigo de cualquier bobada como si fuéramos amigos de toda la vida, cuando podemos sacar una conversación de la cosa más mínima y nunca aburrirnos del otro. Lo amo a él por todo lo que es y quiere ser, por todo lo que logra y quiere lograr (porque estaré ahí junto a él, apoyándolo siempre), porque desde que llegó a mi vida no he dejado de tenerle un amor enorme. De mejores amigos a novios y de novios a esposos, ¿quién diría que dos tontos jugando a casarse y a tener bebés imaginarios ahora realmente se casaron y van formando una familia poco a poco? Ni yo puedo creerlo aún.
A todos sus amigos, familiares y conocidos que estén leyendo esto: sí, prometo cuidarlo cada día de mi vida y tratarlo como se merece. Prometo protegerlo, respetarlo y amarlo cada segundo por el resto de mis días.
A todos mis amigos, familiares y conocidos que estén leyendo esto: la mayoría de ustedes nunca me han leído tan enamorado de alguien y nunca han visto que fuera genuinamente feliz, pero debo decirles que el correcto me eligió a mí y yo lo elegí a él, que es todo lo que necesito para seguir y espero sepan también que no me imagino estando con alguien más ahora mismo. Él me sacó del pozo, él me ayuda a ser mejor cada día incluso si no quiere cambiar nada de mí porque siempre repite que me ama y acepta como soy. Él me hace sentir contento con sólo tenerlo a mi lado, tomándome de la mano en los momentos buenos y malos, acompañándome en cada cosa que pasa y dándome todo su amor, que es lo más importante.
Jace, esto va directo para ti: Espero no estés llorando ahora, porque yo sí estoy llorando mucho. Te amé ayer, te amo hoy y te amaré mañana. Esperamos muchísimo para estar juntos y más aún para casarnos y aún así no puedo asimilar que ya eres mi esposo oficialmente. Ya no sé cómo más expresarte lo mucho que me encantas y lo feliz que estoy ahora mismo, no pude contener las lágrimas cuando te vi y mucho menos ahora que sigo sin poder creer lo que está pasando. Eres un sueño y espero jamás tener que despertar de ti, porque volver a dormir sin ti sería la peor pesadilla. Por favor, nunca dejes de amarme y de mirarme como lo haces ahora, porque eso sería perder mi mundo entero. Te ganaste mis risas, mis besos, mis palabras bonitas. Te ganaste todo lo que soy por el simple hecho de ser tú y dejarme amarte tanto como lo hago ahora.
Te ama con todo su corazón,
Kai Makani-Becker.