Notes![what is notes.io? What is notes.io?](/theme/images/whatisnotesio.png)
![]() ![]() Notes - notes.io |
Pero ahora, tenía un par de casos de amenazas terroristas y debía centrarse en ello. Tomando un sorbo de café, se alisó la chaqueta por costumbre y abriendo una de las carpetas hojeó los expedientes y los antecedentes. El sujeto era un cretino, narcotraficante y estaba metido hasta el cuello en la venta de psicotrópicos a través de la Deep Web. Una lenta sonrisa curvó sus labios, conocía bien aquel sórdido mundo en donde era posible traficar lo que fuera, si querías vender a tu madre o deshacerte de un vecino molesto ese lugar era la solución. Aunque él, solo lo necesitaba para tener la excusa de poder asesinar con razones.
Inicialmente sólo aceptaba deshacerse de lacras sociales, pero en el último tiempo prefería seguir su instinto y buscar el mismo a quienes mandar al infierno. La noche anterior había sido un drogadicto, hoy... Sebastián se incorporó llevando el expediente en la mano y caminó hasta la oficina de su compañero. Murthaig parecía tan fatigado como él.
- Levanta tu trasero de esa silla, vamos a visitar a Lopez - Exclamó acercándose y dejando el expediente sobre la mesa.
El hombre de color lo observó sin saber si bromeaba o no, Delacroix tenía un jodido sentido del humor y, secretamente le asustaba. Pero estaba mas aburrido que una ostra y mirando al hombre mexicano de la foto murmuró:
- Que diablos, vamos.
El castaño terminó de beber el café, le gustaba negro y sin azúcar. Lanzando el vaso a la papelera esperó a su compañero para caminar al ascensor. Nueva York era agradable en otoño, podía usar el traje sin sudar como un condenado. Detestaba el verano y extrañaba a Moscú más que nunca. En el ascensor miró de soslayo a su compañero, Murthaig era buen agente y buen padre de familia. Llevarlo hacia dónde el queria era sencillo, no cuestionaba ni buscaba respuestas. Era el tipo de hombre que prefería no saber y por ende, su compañero ideal.
Descendieron en el estacionamiento, no notó nada fuera de lo normal. Caminaron directo al automóvil y apenas oyó el disparo que tumbó a su compañero de bruces. Sebastián se tiró al suelo arrastrándose por entre los autos mientras un charco de sangre comenzaba a formarse debajo del rostro del agente muerto. Su corazón palpitaba con fuerza, su instinto le decía que ese disparo iba para él.Si Murthaig no se hubiera adelantado... Respirando hondo mantuvo la calma mientras sacaba su arma de servicio, no sentía ira o dolor por haber presenciado la muerte de su compañero de la CIA. Las emociones quedaban replegadas y ya habría tiempo para lamentarse. Permaneció atento y oyó el chirrido de neumáticos característico de una huida. Se parapetó detrás de un automóvil gris plata y efectuó dos certeros disparos a uno de los neumáticos. Sin pensarlo corrió hacia la van negra que huía aún teniendo las ruedas desinfladas.
¿Quienes serían? Su lista de enemigos era mas extensa que la lista de remitentes de las tarjetas navideñas. Un par de agentes que llegaban se sumaron a él y pusieron el auto por delante del furgón. Este frenó en seco y acercándose a la ventanilla del conductor apuntó dispuesto a disparar sin la menor provocación. Los dos hombres no opusieron resistencia y al revisar el vehículo encontró un maletin con fotografías, entre ellas se hallaba la de una mujer que conocía. De pronto, el estacionamiento se llenó de agentes y peritos. La conmoción por la muerte de John Murthaig fue instantánea y tuvo la decencia de mostrarse tristea pesar de que sólo lo conocía desde hace un par de meses.
Lo llevaron para hacerle unas preguntas, las contestó sin mayores problemas. Al salir envió un simple mensaje de texto desde un teléfono desechable:
"Estamos en problemas. Nos vemos en la librería de Broadway Lane".
Arrojó el móvil a un basurero, no sin antes pisarlo hasta dejarlo reducido a nada. Se sentía observado, era fácil ponerlo paranoico y de la paranoia a un arranque violento, sólo había un paso. El taxista parloteaba demasiado y la música hindú era alegre y totalmente fuera de lugar con sus emociones en ese instante. Al llegar a la pequeña librería, descendió casi corriendo e ingresando por la puerta principal respiró para dirigirse a la sección de política, una mujer estaba allí y llevaba unas enormes gafas que le cubrían casi todo el rostro. Se acercó a ella por detrás y con una sonrisa siseó en su oído:
- ¿Que hiciste esta vez?
![]() |
Notes is a web-based application for online taking notes. You can take your notes and share with others people. If you like taking long notes, notes.io is designed for you. To date, over 8,000,000,000+ notes created and continuing...
With notes.io;
- * You can take a note from anywhere and any device with internet connection.
- * You can share the notes in social platforms (YouTube, Facebook, Twitter, instagram etc.).
- * You can quickly share your contents without website, blog and e-mail.
- * You don't need to create any Account to share a note. As you wish you can use quick, easy and best shortened notes with sms, websites, e-mail, or messaging services (WhatsApp, iMessage, Telegram, Signal).
- * Notes.io has fabulous infrastructure design for a short link and allows you to share the note as an easy and understandable link.
Fast: Notes.io is built for speed and performance. You can take a notes quickly and browse your archive.
Easy: Notes.io doesn’t require installation. Just write and share note!
Short: Notes.io’s url just 8 character. You’ll get shorten link of your note when you want to share. (Ex: notes.io/q )
Free: Notes.io works for 14 years and has been free since the day it was started.
You immediately create your first note and start sharing with the ones you wish. If you want to contact us, you can use the following communication channels;
Email: [email protected]
Twitter: http://twitter.com/notesio
Instagram: http://instagram.com/notes.io
Facebook: http://facebook.com/notesio
Regards;
Notes.io Team