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La manera invertir en cuartos trasteros o garajes cerrados de almacenamiento con mucha rentabilidad

Adquirir un trastero para alquilarlo es una alternativa provechos y segura que no requiere ser un líder inmobiliario. Esta opción ofrece una rentabilidad de hasta el 8,5 por cien . Adquirir una nave y luego arrendarla es una forma alternativa de invertir en el mercado inmobiliario que está al alcance de casi todo el planeta, implica poco peligro, no requiere ser un experto en ladrillos y ofrece una rentabilidad de alrededor del ocho por ciento .
Otra de las ventajas es que la operación no supone grandes gastos, con lo que puedes transformarte en un inversor inmobiliario con muy poco dinero, desde 8.000 euros puedes adquirir un cuarto trastero en la capital de entre 3-4 metros cuadrados.
Lo que argumenta a favor de este tipo de producto es la alta demanda por la falta de espacio en las residencias, sobre todo en los pisos del centro de la urbe, lo que hace que no sea muy complicado arrendarlos, aspecto en el que coinciden los especialistas de un portal inmobiliario, que muestran claramente que un trastero es prácticamente una necesidad en los pisos actuales por su reducido tamaño, lo que explica el creciente interés por adquirir este género de inmuebles.
Otro punto en favor de esta opción es el hecho de que la posibilidad de que los inquilinos dañen la propiedad es mínima, como el hecho de que los impagos en las unidades de almacenamiento son bajos, lo que significa que el impago por parte del inquilino es irrelevante.
Otro punto en favor de la adquisición de un trastero es el hecho de que los gastos de comunidad son bajos, aun en comparación con, por servirnos de un ejemplo, las plazas de parking. Una plaza de parking acostumbra a valer unos veinticinco euros de gastos de comunidad, que son unos 5 euros en el caso de un cuarto trastero.
Además de esto, es legal y moralmente más simple desalojar a alguien por carencia de pago que desahuciarlo.
Un cuarto trastero o bien garaje cerrado como espacio de almacenaje es bueno como inversión inmobiliaria. Para acrecentar el valor de una vivienda es la solución idónea para los autónomos y otros profesionales que necesitan un sitio para guardar sus herramientas.
No obstante, hay que tomar ciertas cautelas a la hora de comprar un trastero y, como con cualquier producto inmobiliario, seleccionar la ubicación adecuada es esencial para lograrlo. Si se trata de una inversión para uso personal, lo ideal es comprarla cerca de su casa. Sin embargo, si pretende obtener un beneficio alquilándolo, tenga presente que esta clase de servicio suele ofrecerse en urbanizaciones nuevas, con lo que es mejor evitar las zonas nuevas de las grandes ciudades. En cambio, es aconsejable comprarlos en zonas en el centro y sobre todo en zonas históricas, con edificios antiguos, pisos pequeños y generalmente sin trasteros, por el hecho de que si bien los precios de compra sean más costosos, los alquileres asimismo lo son, y el alquiler está prácticamente garantizado.
Otras sugerencias de Speizy son que los inversores opten por edificios con circuito cerrado de TV para evitar robos y que los muros de mampostería se puedan atornillar a las estanterías.

Y apuntan que adquirir estos espacios en naves y almacenes exclusivos, que pueden ser usados las 24 horas del día, los 365 días del año, es buena alternativa, ya que las comunidades de dueños de edificios residenciales suelen prohibir el uso de estos trasteros en ciertos horarios para no molestar a los vecinos.

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