Notes

A la espera de alguna orientación, Majima comenzó a distraer al pequeñín ahora levantando sus brazos de arriba y abajo con una enorme sonrisa. Era sorprendente como se envolvía con tanta naturalidad esa felicidad de padre e hijo a pesar de no haber estado unidos desde su nacimiento, siendo una especie de conexión inmediata. Ambos se complementaban a la perfección y no había ninguna duda en ello.
Sin embargo, la noticia acerca de la salud del licántropo pronto le explotó esa burbuja de ilusión y diversión inevitablemente sintiendo una conmoción por dentro, pero... no era muy capaz de demostrarlo por completo a causa del distanciamiento entre ellos y que nunca llegó una oportunidad de reunir las piezas dañadas de sus corazones. Aquello lo descolocó por un instante, pero en una maniobra rápida trató de seguir manteniendo el buen ánimo para no preocupar al pequeño Goro siguiendo con la juguetona pantomima.

━ Oh-uh, parece que nuestro pasajero está teniendo un mareo con estas fuertes turbulencias, ¡señor piloto! ¡como su segundo al mando, yo me encargaré de esta tarea! ¡LOS LLEVARÉ A COMER UN MUY BUEN DELICIOSO HELADO! ━ y tal como tuvo la energía para destacarse en hablar, la tuvo para adelantar sus pasos y alcanzar a Lee. En un momento, se las apañó para posar su mano diestra sobre uno de sus hombros con suavidad. Aún si eran mucho los roces incómodos y dolorosos... él aún seguía importándole más que su vida misma.
━ (...no te sobre esfuerces, Lee. Yo me encargaré de eso, solo... sígueme. ) ━ y le susurró, volviendo a sonreír luego e ir delante del chico en busca de un perfecto lugar donde venderían el frío aperitivo. Sería un recorrido rápido, pues Majima ya tenía la ciudad bastante memorizada.