Notes

Revisa tendencias minimalistas en el diseño de la arquitectura
En arquitectura, el minimalismo se ha extendido y admitido internacionalmente en los últimos años. El diseño de los edificios se basa en un estilo fácil y limpio en el que las líneas, los materiales y las formas se combinan en un solo prisma. ¿A qué se debe el éxito de esta tendencia arquitectónica? El mundo de la arquitectura se halla en una fase durable y popular en la que menos es más y en la que se ha demostrado que se pueden lograr grandes resultados con un mínimo de artesanía.
Los edificios minimalistas son muy ligeros en su estructura y tienen una fachada sobria y ligera. El estilo minimalista consiste por norma general en líneas rectas y alargadas, sin ornamentos superfluos, con una estética muy refinada. Pese a su simplicidad visual, el diseño minimalista no tiene nada de aleatorio; todo está diseñado con extrema precisión. Las testeras son generalmente formas geométricas que destacan por su originalidad y carácter propio. arte minimalista interiores son abiertos, ordenados, muy elegantes y organizados. Los elementos ornamentales acostumbran a estar espaciados para crear una sensación de amplitud y se eligen por su discreción, funcionalidad y combinación de colores y materiales.
La iluminación es un aspecto clave de la arquitectura minimalista. La luz natural se transforma en otro elemento de diseño que complementa los demás factores y juega con su desplazamiento por el interior, dependiendo de la luz solar. El diseño de las edificaciones minimalistas busca aprovechar la luz natural. La abundante luz natural crea una sensación de claridad y amplitud. Cuanto más grandes sean las aberturas, mejor, y las ventanas han de ser eficaces en términos de aislamiento térmico y acústico, mas tan reservadas como sea posible, con el menor número de elementos y espesores para asegurar un impacto visual mínimo. Las carcasas se escogen por su esbeltez, lo que hace que los finos perfiles de aluminio que pueden aguantar grandes masas de vidrio sean una alternativa ideal para la arquitectura minimalista. Los sistemas de protección solar permiten aprovechar al máximo la luz del sol y jugar con su incidencia en el interior. Su empleo en un proyecto de estilo minimalista debe estar en consonancia con esta tendencia, por lo que es interesante escoger toldos, persianas y contraventanas muy elegantes y prudentes, preferiblemente con exactamente el mismo acabado y color que los perfiles de las ventanas o puertas.
En el diseño interior de los espacios minimalistas, la iluminación artificial se usa de forma discreta e indirecta, con luminarias técnicas de estilo fácil y líneas limpias, evitando las lámparas ornamentales. La iluminación artificial se integra en el ambiente minimalista general con elementos como focos empotrados, o bien aun focos sin marco que se integran de manera perfecta en techos y paredes.
El diseño minimalista evita el exceso de colores tanto en el interior como en el exterior de los edificios. El monocromatismo es una característica del estilo arquitectónico, con tonos de color generalmente tenues y neutros. El empleo del color responde a la necesidad de crear espacios lumínicos y sobrios. Por lo general, se crean zonas monocromáticas en función de la elección de los materiales y elementos que componen el proyecto. Los colores puros acostumbran a aplicarse sobre superficies monocromáticas o bien fondos de tonos apagados.
El mobiliario de una casa o bien oficina minimalista asimismo reúne las peculiaridades de sencillez, orden y sobriedad. No obstante, esto no significa crear espacios hastiados. Nada más lejos de la realidad. Seleccionar los muebles para un proyecto minimalista puede ser un reto con muchas posibilidades. Los muebles que escojamos han de ser multifuncionales y elegidos como un todo, en lugar de ser independientes unos de otros. En esta clase de diseño, el protagonista no es el mueble, sino parte de un conjunto que comparte una estética común en lo que se refiere a formas, colores y texturas. La esencia de un espacio minimalista radica en la atmosfera que transmite y que aprecian las personas que lo habitan. Así podemos crear un hogar o una oficina prácticos, funcionales y agradables.
El minimalismo no sólo es una tendencia en el mundo de la arquitectura, sino también en muchas otras disciplinas. El minimalismo se manifestó inicialmente en el campo del arte y se extendió gradualmente a la música y la pintura. Es un movimiento artístico que ha tenido un impacto significativo en la sociedad y en nuestra forma de vida. Los orígenes del minimalismo se hallan en Europa, sobre todo en la obra del arquitecto alemán Ludwig Mies Van Der Rohe, pero en la ciudad de Nueva York, en la década de 1960, evolucionó hasta convertirse en un estilo arquitectónico que sigue siendo popular en nuestros días y que cada vez cuenta con más seguidores. Ludwig Mies Van Der Rohe resumió la filosofía del minimalismo en una frase: "Menos es más". Se trata de un estilo y una filosofía con influencia internacional, inspirada en fuentes como la arquitectura tradicional nipona y el movimiento cubista de la Bauhaus.

Emprender un proyecto arquitectónico a nivel de arquitectura y diseño minimalista es un reto emocionante. En el mercado hay muchas opciones que responden a las necesidades de este estilo, como la funcionalidad, la elegancia y la sencillez. Las construcciones e interiores minimalistas ofrecen a los visitantes un equilibrio estético y confortable, con espacios llenos de carisma y personalidad, donde cada detalle ha sido cuidadosamente escogido. En suma, la tendencia minimalista nos permite gozar de edificios y espacios funcionales y confortables, creados combinando todos y cada uno de los elementos edificantes y decorativos bajo un hilo conductor de estilo, elegancia y estética.


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