Notes

Parece que la criatura no quiere la ayuda de nadie y aunque no me guste su decisión, la aceptare e intentare mirar por el bien de estos mortales, impediré a toda costa que retengan la imagen de sobrenaturales ensangrentados en sus salas. - Marcharos si gustáis pero me pregunto cuánto tiempo más podréis aguantar así; cuanto tiempo más seréis capaz de huir de vuestros problemas hasta que estos sean tan grandes que os abofeteen en la cara y no podáis continuar escapando -sonrío durante unos segundos y luego me doy la vuelta, salgo por la puerta y entro a la sala contigua con el resto- La música y las risas prosiguen, todos parecen estar disfrutando de la fiesta y mientras que yo finjo lo mismo, he mandado los cuerpos ensangrentados al espacio, caerán en el olvido para siempre pero de todos modos ya estaban muertos y nadie va a venir a reclamarlos. Hace rato que he dejado de sonreír porque ahora empiezan a buscar parejas para bailar, parece que se han cansado de tanta conversación repetitiva y absurda, y un humano se ha animado a sacarme a bailar, o mejor dicho a quien se piensa que soy; me sonríe, le sonrío forzada y empezamos a bailar, ojalá el tiempo pase volando y me distraiga ahora que mi misión parece que ha terminado.

Las calles apestaban demasiado a putrefacción, los mortales que caminaban a mi lado tosían por alguna peste reciente en las calles, note otros sobrenaturales cercanos, aparte de los demonios anterior, y eso era mala señal al sentir otros, ni sabia donde estaba, mis poderes me fallaban recientemente a todo, mis grietas se alargaron en mi cuello, gruñendo al hundir las garras en mis palmas al controlarme bastante con tanta mirada humana al caminar junto delante de ellos, caminaba descalzo dándome cuenta, las zarpas oscuras se notaban bastante, mi piel, se volvía grisáceo poco a poco, otra mala señal era esa misma, mi piel mortal se iba a romper en cuestión de horas si no me alimentará, y de los humanos no me servia mucho la verdad, no me saciaba la sed, y si devoraba algunos de ellos, no me seria muy útil, resistí todo lo que pude, pensé en dar otro salto en el tiempo a ver donde cayera está vez, necesitaba notar otros sobrenaturales alrededor, aquí no rastree alguno, podría convertir a alguien en un demonio, o vampiro, pero era mal gastar ahora energías las cuales se iban a gastar con rapidez en estos estados, centré mi mente junto a mi velocidad para entrar en el túnel del tiempo, notaba como todo mi cuerpo le costaba acelerar a mi rapidez y aunque forzará mis piernas, las grietas se endurecían sobre toda la piel, me costo demasiado dar esté salto, al menos lo logre, pero tampoco sabia donde caí exactamente, si antes estaba perdido, ahora lo estaba aun más, sin estar conectado a otras mentes para dirigirme a que época estaba situado. Gruñí al estamparme contra un hogar abandonado, me deje caer ahora en esté suelo de piedra, estaba destrozado por lo visto, de ello me quede ahora tumbado, manteniendo los ojos cerrados, intentando recuperarme poco a poco tomando esté leve descanso. . .

Después de terminar de bailar con ese apuesto joven cito, me escabullo como puedo para salir al balcón y tratar de desconectar de tanto mortal. Tardo pocos segundos en darme cuenta pero una extraña sensación recorre todo mi cuerpo de principio a fin, primero por aquel putrefacto olor y segundo porque he notado que alguien ha viajado en el tiempo hacia el futuro; con tantas emociones intensas para lo que habitualmente estoy acostumbrada, casi se me olvida que he viajado a una Italia del S.XIV que pronto se vería desolada por la peste bubónica. Tengo que viajar en el tiempo y descubrir quién ha sido la otra persona que lo ha hecho, tal vez sea algún familiar y necesite ayuda o tal vez alguien que quiera cambiar la historia en sus propios beneficios, sea cual sea la respuesta lo pienso averiguar pero antes debo hacer que un par de familias desaparezcan de aquí, si devuelvo a la mortal a este momento concreto y abandono a estos humanos a su suerte, morirán y provocaran algunos cambios insignificantes en la vida humana pero aún así no puedo permitirlo. He vuelto ahora a la fiesta y me he reunido con el hermano de la mortal que suplanto, le he convencido de que me encuentro gravemente enferma y me deben llevar a casa y al resto los he manipulado para que tengan la necesidad de volver a sus hogares o huir de Italia, según lo que ellos prefieran. Tampoco ha resultado muy difícil convencerlos y que olvidaran lo que había pasado esta noche; en sus mentes compartirán que han pasado una agradable velada y ahora es hora de volver a sus respectivos hogares. Al llegar a casa de esta familia y tumbarme sobre su cama, la he liberado de la dimensión donde estaba atrapada y he hecho que ocupe mi lugar ya que ella mantendría los mismos recuerdos que el resto. Y ahora que me he deshecho de todo el mundo, por fin he podido dar ese salto en el tiempo aunque por lo que mis ojos pueden observar, he terminado frente a un hogar abandonado en Viena. - ¡Ahí estáis! -exclamo al ver por una de las ventanas de la casa, a la criatura de la fiesta que ahora estaba tumbada en el suelo- El pomo de la puerta esta medio roto así que he podido entrar con facilidad pero cuando he empezado a hablarle no me ha respondido, parece que esta inconsciente y su aspecto grisáceo no me da buena espina. Cuando he cogido una almohada, me he acercado a él y he acomodado esta sobre su cabeza he podido ver sus grietas y rostro con mejor precisión y claridad; hasta este momento he sido incapaz de reconocer a Destióm, hace mucho tiempo que no nos reencontrábamos y lo cierto es que lo añoraba. - Querido Destióm, ¿qué te ha pasado? -vuelvo a hablar con la misma familiaridad con la que hablaba a todos mis seres queridos aunque no pensaba que ahora me pudiera contestar- Mientras pronuncio aquellas palabras, poso mi mano derecha sobre sus grietas y empiezo a acariciar parte de su mejilla; aunque ahora este descontrolado y apenas lo reconozca, sigue siendo una parte importante de mi y rezo porque las palabras de Therós algún día hagan efecto en él. Tal vez no deba hacer esto pero mientras esta en este estado en el que ni si quiera yo sé cuando despertara, he empezado a fabricar en su mente imágenes junto a Therós y Anarýa y los he acompañado de otros recuerdos felices con el resto de familiares con lo que espero que mientras esta en este estado, le transmitan paz a su atormentada mente.

Mantenía los ojos cerrados, la mente centrada en otros lugares, como si hubiera dejado de momento el cuerpo vació, pero notaba el cansancio después de tantos siglos estando en la tierra intentando recuperar la forma humana al menos, las grietas aumentaban, la piel se destrozaba con velocidad. Sabia que iba a perder de nuevo el cuerpo mortal y aparentar la forma original, toda oscuridad existente, más apariencia siniestra, y hasta recuperar nuevamente la piel mortal, iba a durar varios siglos. Creo que me iba a quedar ahí justamente, tumbado hasta que me recuperara, saber cuanto tiempo permanecería, mientras. . . Estaría encerrado en mis pensamientos una y otra vez. . . Tenia una sensación extraña, como si alguien estuviera ahí al lado de mi cuerpo, intentando que despertará del agotamiento tras un salto en el tiempo, pero ni yo podía restaurarme para levantarme, y menos para Aniquilar, que era algo común en mi hacer constantemente, >> Me vinieron unos fragmentos con Therós cuando era más pequeño, con la edad de diez años preguntándome todos los días - ¿Y mami, dónde está? ¿Y por qué papi no es cariñoso contigo al igual que conmigo y nuestra hermana mayor? - La mirada de un niño Inocente ante la mirada de un ser que apenas le importaba aquello, me costaba demasiado en responder sin dañar su mente que estaba desarrollándose, Anarýa fijo sus ojos en los míos como si me estuviera diciendo “Mejor no hables, me encargaré yo” y luego fue hacia Therós agachándose poco a poco sonriendo de lado, pero para que no se preocupara por nuestras miradas tan secas por el asunto – Mami se fue hace mucho tiempo, no te preocupes, no la necesitamos, nos tenemos a los tres para el resto de la eternidad, sea como sea, no lo olvides pequeño, papi es algo frío con Desmón por ser el más complicado de nosotros, un día lo vas a comprender y le ayudarás a cambiar su mente, aunque sea un uno por ciento – Giro la cabeza para observarme en como reaccionaba por aquello, formando en sus labios una sonrisa leve, luego le miro de nuevo – No preguntes de momento ¿Vale? Disfrutemos del tiempo, aprovecha que tú tienes infancia y vamos a pasarlo bien, cuando crezcas vas a entender las cosas en otro punto de vista – Acaricio su mejilla sonriendo mucho ahora, nuestra hermana le enseñaba los caminos buenos y yo le lleve a su autodestrucción << Intente regenerar partes de mi cuerpo aunque no pudiera ni moverme del lugar, como una maldita estatua, repitiendo el mismo ciclo como la última vez. . . Soltaba gruñidos en mi interior, acumulando calor Apocalíptico, aunque rompiera totalmente mi forma humana, pero luego podría moverme sin problemas, no me importaba caminar sobre la tierra como mi yo original, al menos así no me tendría que preocupar por si me saliera más grietas en mi. Oí como las más alargadas grietas rompían el resto del cuerpo, dejando en aquella zona chirridos intensos, al hacer cenizas la piel mortal que me rodeaba, dejando ver ya esa inquietante oscuridad a la vista, el flujo de la “lava” como si fueran venas en todo mi aspecto, quien estuviera aun a mi lado, la esencia familiar me vino de golpe sin poder aun abrir las pupilas, notaba cada vez más furia acumulándose en todo el cuerpo para poder moverme en cuanto estuviera listo.

Nuestras mentes están conectadas en estos momentos y mientras que estoy intentando mostrarle fragmentos de recuerdos agradables, puedo casi palpar su dolor; es agónico y dudo que alguna desaparezca de su interior y si lo consigue, será un camino complicado. ¡Basta! soy yo Destióm, detente -exclamo mientras aprieto mis ojos con fuerza y tapo mis oídos por culpa de los chirridos que forma su piel al romperse- Aunque no lo he expresado, siempre me he sentido culpable por la perdida de Therós y por el sufrimiento de Destióm pero tanto antes como ahora, estoy atada de pies y manos. Quiero ayudarle a superar su dolor y hacerle ver que aunque ha perdido a su hermano, aún tiene a más seres queridos a los que le importa y tal vez sea un pensamiento retorcido o alocado, pero a veces una parte de mi no puede evitar preguntarse si todo formó parte del plan de Therós, si él no vio otra salida que la de autodestruirse para salvar a Destióm de si mismo. Pero conociendo las futuras intenciones que tiene Des, supongo que tendré que esperar porque sólo el propio Therós podrá darme esa respuesta

>> Lo peor de recordar cosas de mi hermano pequeño, es que cada vez los recuerdos vienen con duros choques dentro de la cabeza, como si hubiera viajado al pasado, poder cambiar las cosas por su propio bien pero en realidad sin lograr nada, ya no estaba entre nosotros, un error que iba a tener en mis largos y eternos caminos. . . - Des. . . ¿Por qué no eres como nosotros lleno de alegría? Nuestra hermana ríe, padre igual varias veces conmigo, pero tú eres distinto, quiero a mi familia unida. ¿Por qué eres así? - Las preguntas y curiosidad de un niño pequeño eran complicadas de explicarle que mi mente era todo lo contrario a esas lineas de felicidad y familiaridad, no comprenderá nunca un detalle de mi nacimiento, la parte bestia recorría en mi interior, la In-humanidad era precisa en todo momento, da igual todo el tiempo que pasará, sabia de sobra una cosa, no iba a cambiar realmente, era camuflar mi realidad al añadir mascaras falsas para él y no podía engañarlo, nuestra hermana Anarýa intervenía bastante entre nosotros, para calmar la conversación y así no ser tan frío en mis contestaciones, al menos ella sabia como mantener todo en plena tranquilidad entre nosotros. - Cuando seas mayor vas a ver las cosas de otro modo como hago yo con nuestro hermano oscuro. ¿De acuerdo? De momento vamos a centrarnos en divertirnos y reír – Sujeto su mano para irse ambos, yo como siempre permanecía observando el vació del Universo constantemente. . . Perdiendo la mirada en todas aquellas galaxias formándose, torturando mi mente, y bueno mi historia tan destructiva ni había comenzado aun. Padre me tenia muy vigilado por cualquier movimiento, temía que un día llegará a descontrolar de nuevo, y siendo adulto, mi poder pudiera hacerme ya una bestia completa sin vuelta atrás. << Abrí de golpe mis pupilas, formando seguidamente un intenso gruñido al sentir como todo mi cuerpo se destrozada por la piel humana que aun me quedaba encima, moviendo las garras, notando aun a la mujer al lado de mi posición, observándola ahora fijamente. . .

Y de nuevo vuelvo a sufrir el estruendo tan espantoso que ha formado y que rompe mi calma, una calma con la que había sido criada y acostumbrada; una calma que se rompe cada vez que habito en este planeta. - ¿Me reconoces? ¿sabes quién soy? -descubro mis orejas que hasta ahora permanecían tapadas, me levanto y retrocedo un poco por precaución. Destióm está en su forma original y me aterra, no por su aspecto, más bien me aterra pensar qué puede hacer ahora, ya que si al vernos estaba descontrolado no hay nada que me asegure que su reacción será distinta; tal vez ya no le importa nada pero hay algo en mi interior que me suscita a quedarme a su lado, aunque pueda ser peligroso, sé que cometo un error si continuo mi camino, me alejo para siempre y lo abandono a su suerte. No creo que me necesite para nada ni que se deje ayudar, tampoco creo que sea fácil hacerlo pero aunque pertenezcamos a distintas líneas seguimos siendo familia y las familias se ayudan unos a otros aunque a veces hayan peleas; así que mientras fijo mi mirada en la suya, aún me pregunto si acaso está mal querer buscar esa unión y si algún día será posible olvidarnos de a qué línea pertenece cada uno... Por mi naturaleza tiendo a soñar con que esto ocurra, tiendo a imaginar un idílico reencuentro familiar, a buscar la pureza y bondad en todo y todos y sé que pese a su inhumanidad Destióm también podrá alcanzarlo algún día; la historia me ha enseñado que lo imposible a veces se puede volver posible, tal vez sólo sea cuestión de tiempo y mover los engranajes correctos y a mi el tiempo es lo que precisamente me sobra.

Clave mis garras en el suelo, destrozando lo con brutalidad, viendo como ya la piel humana no existía en mi, soltando alargados gruñidos al intentar moverme con algo más de facilidad, como si estuviera aun paralizado por tanta perdida, y aquella mujer estaba enfrente de mi, hablándome, como si le entendiera en este modo, cuando mi mente solo necesitaba aniquilar de inmediato, para mi al escucharla eran sonidos siniestros, no era lenguaje mortal en absoluto, a saber que estaba diciendo, observando como retrocedía, notando ese miedo en su mente, eso me alimentaba demasiado, saque mis colmillos rojizos y ya me costo por tanta paralización en todo el cuerpo, rompiendo la piel dura al morir sobre mi, me quitaba todos los restos pegados, ya mi forma humana no estaba a la vista, poco a poco me envolvía de tinieblas intensas, arrastrando hacia mi posición toda la maldad posible. Los colmillos sobresalían mi mandíbula ahora, estuve a saber cuanto observando en borrosidad a la mujer rubia, dejando las garras atravesando las losetas, formando más grietas bajo mía, notando en ella un inmenso poder familiar, pero ahora mismo no sabia de quien se trataba en realidad, estaba sediento, y no sentí muchos sobrenaturales en estos lares, force mis piernas para levantarme, apoyándome en un muro, atrayendo las energías negativas y convertirlas en esencia maligna, alimentándome de ello por el momento, desgarrando el muro con las garras para ponerme de pie, poniéndome firme con mucha dificultad, odiaba estar en estos estados sin el cuerpo humano. Y más sin devorar a nadie, mi sed aumentaba demasiado cada segundo, gruñí al sentirme extraño, tanto tiempo sin estar en una de mis formas, intente dar pasos hacia delante pero temblaba todo a mi alrededor o eso me parecía a mi en estos estados. Restaure algunas cosas interiores, partes de la mente para entender el lenguaje de la tierra. - ¿Dónde estoy exactamente? - Dije en un tono serio sin poder ver a la mujer con claridad.

"Recuerda quién es, Aytha" me repito una y otra vez hasta calmar mi ruidosa mente, me cuesta verlo en este estado porque nunca sé cómo va a reaccionar pero tengo que confiar en él y también en mi entrenamiento para este tipo de situaciones. ― Nos encontramos en Viena, en el S. XIV -contesto mientras centro mi mirada en sus ojos, casi sin pestañear- Se encuentra tan dañado que sé que pronto va a necesitar alimentarse y no quiero que se ponga en peligro, sólo los Dioses sabrían de qué serían capaces estos mortales o tal vez otras clases de criaturas al enterarse de la presencia divina entre ellos. Sé que es poderoso pero temo que extinga una raza o se dañe contra enemigos que se aprovechen de su estado actual, mejor será tomar precauciones. ― Destióm, deberías alimentarte para recuperarte -propongo mientras utilizo mis poderes para crear una barrera protectora invisible, a mi alrededor, luego busco cualquier objeto punzante en la sala y cuenco, me corto un poco mi mano y lleno el cuenco con un poco de mi sangre, seguidamente dejo el cuenco a unos pasos de él- Necesita alimentarse y no le sirve cualquier sangre, entonces no hay más remedio que utilice la mía aunque no tengo pensado darle demasiada, sólo le doy la justa para que pueda caminar y también es por eso que he creado esta protección, tal vez sienta más sed de sangre y trate de buscar más aunque hasta ahora parece que se ha controlado incluso en su forma original.