Notes

"Eres ese tipo de personas hogar a quienes tan solo les hace falta un abrazo para hacerte sentir en casa. Y da igual que el día haya sido una mierda, que ahí estás tú con esa preciosa sonrisa de niño pequeño para arreglarlo. Eres como el segundo previo al primer beso, como la risa de un niño pequeño, como una ola a punto de romperse, como un orgasmo a punto de estallar, como desactivar una bomba de relojería justo antes de su detonación. Eres esa persona con la que compartiría invierno, resaca, cigarro, corazón y vida. Con la que mojarme cuando llueve. Por la que la nostalgia ya no duele, ni siquiera un domingo por la tarde. Has llegado a mi vida y, así, como una bola de demolición atentando contra toda ley física, has hecho tambalear todos los cimientos que había edificado en mi contra. Has inundado de vida cada rincón de esta ciudad perdida. Y me has hecho amar cada pedazo de mí carente de sentido hasta la fecha en que te conocí, en que te vi sonreír por primera vez y me cambiaste la vida." — Sabes bien que es para ti, quiero que tengas muy presente que, a pesar de todo el caos que hemos vivido, te sigo amando mucho y estoy feliz de tenerte conmigo.

☕ - 00:00 ; 你我会没 encadenados
Y ahora, dime, cómo hago a mis manos entender que por mucho que te escriban tú no vas a volver; que de nada sirve esperar, mirar atrás, que quien quiere quedarse nunca se va; que ya solo soy el trago amargo de tu ausencia, la voz reseca de un domingo en tu resaca, la vez que me arrojé en caída libre por tu espalda, el recuerdo de tus dedos por debajo de mi falda, el “sálvese quien pueda” de un suicida enamorado y la nostalgia de pensar en un tiempo pasado; que sigo viendo el vaso medio lleno, porque si hablamos de vacíos tendría que empezar por eso de que desde que tú no estás la primavera ya no florece entre mis dedos, la poesía ya no se corre por tus besos.

- ̗̀I miss you so much that on my watch is still yesterday ̖́- off
Tal vez te siga pareciendo cliché, pero yo sigo sintiendo lo mismo desde hace tiempo. He escuchado que tú aún mencionas mi nombre cuando la noche es demasiado pesada o cuando recuerdas que yo temblaba de frío en días como estos cuando tomabas mi mano. Es gracioso que te siga recordando, pero la verdad es que siempre he sido una masoquista emocional o tal vez es que, sólo tengo esta discapacidad emocional, que no me permite dejar de pensar en ti de cuando en cuando. Mi problema en realidad eres tú. Mi problema es que ya no estás y me falta la mitad de mí. El problema es que despierto sólo con la mitad del cielo azul y con la mitad de mi corazón, que me he quedado con todos los puntos finales y me faltan todas las mayúsculas para empezar tu nombre, porque también la palabra amor se fue contigo. No sabes cuánto te echan de menos mis páginas y repisas, que todos mis dibujos extrañan tener tus ojos y tu sonrisa de madrugada, que mi cuerpo sigue teniendo la necesidad de estar entre tus brazos noche tras noche. Apuesto que has escuchado de aquella vez que intenté ir a tu casa, pero me acobarde en el último momento y decidí dar la vuelta con lágrimas cosiendo mi risa nerviosa. Seguro te han contado que cuando intenté escribirte la verdad terminé escribiendo otro poema sobre ti en mi diario y que jamás te llegó, quizás lo único que quiero decirte es que estoy perdida sin ti, y que la verdad es que me extraño un poco más a mí. Me gustaría haberme podido quedar con la mitad de ti, pero que esa siempre fue tuya, desde siempre me ha gustado la manera en la que eres tan tuyo y en la que no necesitas nada ni a nadie. He amado tu libertad y la forma en la que tus alas se alejan tanto como me gustaba ver el atardecer a tu lado, siempre supe que nunca te quedarías y por eso te amaba más, porque era como presenciar un eclipse o una lluvia de estrellas, y yo sólo deseaba que eso jamás terminara, pero como todas las cosas hermosas, terminó. No pretendo que te quedes conmigo y dejes los aviones y los trenes que te esperan, porque ellos también te extrañaran, pero no te das una idea de lo mucho que me hubiera gustado. Lo que más me duele es que ahora sólo soy lo mitad de castaña que era y que mis mejillas son la mitad de pálidas que de costumbre, que mis tardes duran siempre la mitad del día y no el día entero como eran estando contigo. Ya no hay eternidades en horas contadas ni infinitos en un abrazo de despedida, ya no importan los autos que pasan o los pasos que dura una charla, porque ahora sólo tengo la mitad de la conversación y no sé cómo terminarla. Aquí sólo cae la mitad de la lluvia y me deja siempre una media sequía que resquebraja mi corazón un poquito más, pero eso pronto desaparecerá, lo sé. ¿Sabes? Tal vez lo más difícil de decir es que no tengo la mitad de mi corazón, sino que te amo completamente con la mitad de lo que soy. Te echo de menos, era lo único que te quería decir, listo.

PANDITA HERMOSAAAA. 最好.
Te diré qué hora es y qué se supone debería estar haciendo en este momento, son las dos de la madrugada y debería estar en el quinto sueño, pero es que tengo días pensando en ti y con muchas ganas de decirte algo: gracias. Ya de seguro te preguntas "¿y a esta qué bicho le picó?", no sé si te lo he dicho o no, pero eres alguien sumamente importante en mi vida a pesar de no verte ni hablarte tanto como me gustaría hacerlo. He tenido la oportunidad de conocer gente muy preciosa y maravillosa, pero no había conocido ninguna como tú en todos estos años, estás tan lleno de cosas lindas e irradias una luz hermosísima.
No sabes lo infinitamente feliz y agradecida que estoy contigo por aparecer en mi vida con tu luz e iluminarla cuando todo parecía estar más oscuro que nunca, por devolverme la sonrisa que daba por perdida, por ese boom-boom que me da cada que estamos juntos, por quererme de la forma tan bonita que lo haces, por estar en mis peores momentos sin darte cuenta que lo son, por dejarme conocerte y dejarme cada vez más claro que eres todo un ser de amor que no quisiera perder nunca.
Te quiero, te quiero, te quiero muchísimo.
Tenlo bien tatuadito en tu mente y corazón, ¿sí?
Gracias por existir y brillar muchísimo más que sol.
Permíteme estar presente por otros meses más y, si es posible, unos cuantos años en tu vida para seguir dándote todo el amorcito que siente mi corazón por el tuyo. Las estrellitas y la luna te darán besitos, abrazos y velarán tus nochecitas en mi nombre, muamua. Estemos juntos pronto que te extraño. ♡

Eres libre. ¡Exprésate! rayito
Me sobran sueños encima de la almohada y me faltas tú. Me faltan todos los 'ojalás' que, sin decirlo, le quitamos a nuestro futuro en cada roce de nuestros labios. Me sobran las sábanas, la almohada, el pijama y hasta la cama, sólo porque tú me faltas esta noche. Qué duro es volver a la realidad después de haber comprobado cómo sería una vida juntos, de experimentar que la felicidad existe y que pasea de nuestra mano. Qué difícil se hace eso de dar las buenas noches tras una pantalla cuando noche a noche, no nos ha hecho falta dárnoslas, porque las hacíamos nosotros. Qué bonito saber que te tengo, que difícil decirte adiós. Ojalá borrar todas las despedidas, ojalá no verte más por la mirilla, ojalá acabar con todos estos 'ojalás' que se me clavan en el pecho. Quédate esta noche, por favor. O vete. O mira, no sé. Pero por favor, no me faltes.

Espacio para escribirle una carta a la persona que más amas en el mundo.
Si algún día te preguntan por mí no les digas nada, sólo sonríe, asiente y di: sí, la conocí. No les hables de lo feliz que te hice, ni siquiera les digas que fuiste mío, que era tuya. Cuanto te pregunten por mí diles que eso ya es historia, aunque haya días en los que aún recuerdes mis ojos brillantes apuntando directos a ti. Si te hablan sobre qué sabes ahora, diles que nada, aunque sepas de mí. Aunque me vieras a lo lejos algún día por la calle, aunque estuvieras informado, aunque supieras realmente de mí, no les digas nada. Si algún día te preguntan si me quisiste, si así lo deseas, te dejo decirles que no. Porque sólo tú entonces sabrás si tenía sentido esa playa, esas gotas de lluvia que parecían cristal, sólo tú sabrás si mi cama contará secretos a quien los quiera averiguar. Sólo tú podrás saber si me querías. Y nadie más lo sabrá. Si algún día alguien intenta hablarte sobre mí no les dejes decir nada; no porque te queme mi nombre en los oídos, no porque hayas dejado de quererme, sino porque aunque te murieras de ganas de saberlo debes hacerte el fuerte. Si algún día te preguntan si te quise, diles lo que se te ocurra en ese momento. Si les dices que sí, estarás en lo cierto. Si les cuentas que luché por ti hasta el final habrás dicho la verdad. Si les dices, en cambio, que no, el único engañado será tu corazón, que sabrá con total certeza que mientes. No les cuentes que las sábanas envidiaban la insensatez de nuestros cuerpos, no les hables de marzo, ni de esos muros derrumbados. Cuando te pregunten por mí no les cuentes que te hacía reír en los momentos duros, ni que jugaba contigo a cualquier videojuego aunque perdiera siempre. No les cuentes sobre esas tarde de galletas y leche, de besos y abrazos, de mordidas y cosquillas. No les dejes que sepan nada, absolutamente nada, sobre la paz y tranquilidad que tanto te daba, que tanto buscabas y al fin tuviste. Si te preguntan por mí no les cuentes nada, nada, nada. Ni de mis manías, ni de mis fallos, ni de mis aciertos. No les digas jamás que me sentí parte de tu familia, aunque así fuera. Ni les confieses que jamás habías visto a alguien tan radiante y feliz al caminar a tu lado, no les digas que fuiste el primero al que amé de verdad ni tampoco que me dejaste ir, si quieres di que era porque no me querías. Te dejo decirles que tuve la culpa, te dejo tacharme de tu vida, te dejo que les insistas en que si me dejaste ir fue porque me lo gané a pulso. Aunque todo eso sea mentira. Si me preguntan por ti sonreiré. Les diré que fui feliz mientras estabas. Les diré que sufrí cuando te fuiste. Les hablaré de ti. Les contaré que tenías mil defectos pero mil y una virtudes, que siempre estabas serio pero cuando sonreías brillaba un poco más el mundo. Les hablaré de nosotros como una estrella fugaz- y efímera- en el cielo. No les diré que me mataste con tu adiós, sólo que dejé de respirar unos segundos y volví a coger aire para continuar. ( http://notes.io/vtKS ) Siempre fui de decir cosas de más.