Notes

08 de septiembre del 2018
Carta dirigida a mi bebé.

De: Taddeús.
Para: Francesco.

Primer mes con el amor de mi vida.

Mi amor, ¿cómo es que puedo iniciar un texto como éste, si aún no puedo ni asimilar que hoy en día estemos cumpliendo nuestro primer mes de relación?

Todo nuestro tiempo juntos me has mostrado lo maravilloso que eres, desde el primer día de conocernos. He oído que las personas suelen perder el entusiasmo en alguien a medida que pasa el tiempo, pero entonces, ¿qué hiciste conmigo? Haces que los meses a tu lado parezcan segundos, y si no me crees tan solo piensa en que nuestro “primer segundo beso” fue el 21 de abril y recién casi cuatro meses después, nos hicimos novios. El tiempo no me pesa estando a tu lado, disfruto conocerte, disfruto estar a tu lado, ser parte de tu vida día a día y tener la seguridad de que eres tú el amor de mi vida, que las almas gemelas existen y que por supuesto, eres la persona con la que deseo estar por el resto de mis días.

Empezaré por recordar lo nervioso que estaba aquella noche que te pedí ser mi novio. Ahora es cuando sabes perfectamente que no sé guardar sorpresas. Veía la hora como un loco y sabía que no podía tardar más o me desmayaría, aunque incluso sabíamos cuál sería la respuesta del otro, sea quien sea el que lo pida.
Soy como aquellas típicas personas que sudan helado, repiten mucho las palabras y cuestionan mucho a la persona contraria (discúlpame, bebecito). Modificaba los textos día y noche, los acomodaba, ponía el header un centímetro más arriba, dos centímetros más abajo. En conclusión, era un loco, pero no se comparaba a mi felicidad cuando minutos después observé nuestra conversación llena de taldos por parte tuya, diciendo que sí hasta el cansancio. La sonrisa la sigo teniendo hoy en día, al recordar al dulce hombrecito que tengo como novio. Me encantas tanto.

Me enseñas tantas cosas día a día, me haces descubrir algunas características mías que no sabía tenerlas. Tengo que contarte incluso que, algún tiempo atrás desde tu llegada, mis pensamientos eran totalmente cerrados sobre tener una pareja. Yo no quería nada con nadie, sentía que no tenía la estabilidad emocional para corresponder a alguna de las personas que conocía o vaya a conocer, era un no sin más, no tenía ganas de hacerle caso al amor. Pero el amor de mi vida volvió a mi camino, y me colocó el mundo de cabeza en una forma en la que a todos era un “no”, pero para ti era el más grande “sí” de mi vida entera. Por lo que te puedo asegurar que, cada día que despierto es un nuevo día en el que me enamoro de ti.

Me haces sentir amado, me haces sentir tranquilo y es algo que adoro tantísimo de ti. No puedo ordenar mis pensamientos cuando trato de expresarte todo lo que siento por ti, porque mi corazón se acelera, mi sonrisa es inevitable, al igual que mis taldos o constantes sonrojos que me fuerzan a dejar de escribir por un rato hasta lograr calmarme y seguir escribiendo (como ahora).
Desde cuando me sonríes, hasta cuando me taldeas, me envías fotos de cachorros, conejos, las flores en cualquier momento del día, desayunos, palabras cursis que me alegran la semana, tus pequeños celos, tus ojos, tus manos, tus tatuajes, zonas que amo besar, como tu cintura, labios y tus te amo, todo eso me enamora de ti. Todo tú eres la combinación perfecta de alguien a quien no deseo perder. Estamos cumpliendo un mes y estoy con todas las energías del mundo para seguir, para alcanzar esos dos meses en un abrir y cerrar de ojos, los cuatro meses, el medio año, ¡y el año!

Al final del día eres la única persona en la que pienso, la que siento como mi refugio, como mi dulce hogar. Porque cuando estoy contigo tengo todo, y voy a seguir conquistándote todos los días, como si fuera la primera vez. Tengo tantas capturas de pantalla de nuestra conversación, de tus fotos, de nuestras fotos, que estoy seguro que si llegáramos a verlas todas, estarías sonrojado a más no poder y yo querría volver a besarte al verte así.

Tú eres diferente a cualquier otra persona que yo haya conocido, tú no tienes punto de comparación con alguien que haya llegado ayer, lo haga hoy, mañana o pasado. Yo veo magia en tus ojos, yo me lleno de amor cada vez que estoy contigo, jamás me había sentido así y sé que la única persona que lograría hacerme tan bien en esta y todas las vidas, serías tú. No deseo a nadie más estando contigo, eres totalmente mi vida, el amor de mi vida, porque eres el único quien mueve mi mundo de esta forma. Quiero hacerte mi esposo, quiero casarte conmigo, tener una familia y pasar juntos los días festivos más importantes del año. En pocas palabras, quiero formalizar una vida contigo y sé que lo haremos a largo plazo, ¿o no es así, bolita? LNFLFFÑSÑSKXLDN.

Te amo tanto, que no podrías comprenderlo. Te amo de la forma más cursi, más pura, más respetuosa, más honesta y más entregada únicamente a ti. He pasado este último mes pensando día y noche en lo bien que me haces, en lo adicto que me he vuelto a tus labios, a tus mordidas sobre los míos, a tus expresiones (que me dan ganas de comerte la boca), a tus berrinches, a tus quejas, a tus peticiones, escenas nerviosas, mensajes en los que no puedes dejar de estar sonrojado al enviarlos y sobre todo, a tu amor. Al igual que te has tenido que acostumbrar a mis escenas de celo constantes porque no estoy dispuesto a perderte de tal forma, a mis caprichos contigo, cuando me acerco a ti a darme mis propios mimos, a todo lo que somos juntos. Me provocas soñar contigo día y noche. Eres mi sueño.
Espero que te haya gustado aquella playlist, la hice recapitulando momentos a tu lado y algunas que me hicieron pensar en ti en momentos específicos de nuestra vida juntos.

Me vuelves loco, conejito.
Tú y tu forma ser.
Tú y la forma en la que me enamoraste.
Tú y tu sonrisa.
Tú y tus besos.
Tú y tus caricias.
Tú, tú, tú, solamente tú.
Feliz primer mes, amor mío.
El primero de muchos.

El amor de tu vida, Taddeús.